Seguí con atención el discurso que el Presidente del Gobierno realizó el día 20-2-2013, en el Parlamento con motivo del debate sobre el estado de la Nación.Creí ciertamente cuando dijo, que él no estaba en política por dinero, ni por afán de medrar o conseguir otros fines imposibles para él fuera de la política.
Aludió a su condición de Registrador de la Propiedad, empleo al que son muy contados los que pueden llegar a ello por las exigencias intelectuales que ello lleva consigo, y en definitiva demostró que en la vida privada estaría ganando mucho más dinero que en la vida política, incluso hizo público su patrimonio antes y después de estar en política.A lo largo de nuestra democracia, hemos visto innumerables cargos públicos sin titulación académica necesaria, que han llegado a ser, por ejemplo, alcaldes de importantes ciudades, diputados, incluso alguno, director de la Guardia Civil ó ministro del interior.
Hemos ido poco a poco tal vez inconscientemente, creando un caldo de cultivo para la situación de corrupción que se ha generado y que hoy en día además de ser habitual en cualquier ámbito, es la segunda causa de preocupación para los españoles después de la del paro.Al hilo de las declaraciones del Sr. Rajoy, cabe pensar que en el caso de Navarra, concretamente nuestro ex presidente D. Miguel Sanz Sesma, con su puesto antes de dedicarse a la política de Maestro de Escuela, es evidente que además de ser envidiado por sus compañeros de profesión, que no hubiera podido ganar de la administración los cientos de miles de euros que la prensa local le atribuye en veinte años y por supuesto jamás en su condición de Maestro hubiera ganado 89.739 pesetas por asistir a 36 reuniones de media hora en 18 días.
Lo mismo se puede decir de nuestra Presidenta Doña Yolanda Barcina que en los escasos días que estuvo sin puesto político al dejar de ser Alcaldesa de Pamplona y ser Presidenta del Gobierno Navarro, se apresuró a volver a su plaza de docente. Y que no hizo ascos a recibir en el mismo tiempo que el Sr. Sanz, la nada despreciable cantidad de 68.553 euros.
En este apartado me tengo que referir a una carta publicada en Diario de Navarra el 7-5-2007, titulada Apoyo a la Alcaldesa en la que literalmente se dice: “No dudamos que seguirá con esa entrega desinteresada, con esa sonrisa y con esas ganas de trabajo por y para Navarra. Crecida ante la adversidad y excepcional administradora”.Le siguen D. Álvaro Miranda, D. Carlos García Adanero, D. Alberto Catalán, D. Roberto Jiménez, D. Samuel Caro, D. Javier Caballero, D. José Iribas, D. Enrique Maya y Doña Ana Elizalde. A excepción del Sr. Jiménez y el Sr. Caro, todos de Unión del Pueblo Navarro, y en descarga del Sr. Maya, decir que consideró abusivas las dietas, pero por supuesto que no renunció a ellas.
Tenemos a mi modesto entender, el agravante y la falta total de escrúpulo y consideración para con el pueblo, por coincidir estas reuniones de pagos suntuarios con recortes acordados por ellos mismos, como el 5% del sueldo de los empleados públicos y la congelación de las pensiones de los jubilados y todo ello dentro de la mayor crisis que se ha conocido en nuestro País, donde la pobreza y la indigencia es más frecuente de lo que se cita en la prensa. Bonita manera de atajar la crisis con la ley del embudo lo ancho para nosotros y lo estrecho para los de siempre.
Ante estos hechos ¿qué se puede hacer?, en mi caso lo tengo claro, desengañarme para siempre de que prácticamente todos los políticos son iguales, puede haber honrosas excepciones y no me digan el tópico de que no es bueno generalizar y los que puedan presumir de honradez, tal vez sea por no haber tenido oportunidad todavía de tocar “pelo”. Tengo los suficientes años para haber conocido a un político que vivió austeramente, que jamás se le conocieron propiedades y que murió si vale la expresión, pobre. Se llamaba D. Amadeo Marco Ilincheta.Poco más tarde surgió ,como otros que podía citar, uno que llegó a ser Presidente de la Diputación. Se vio implicado en el Caso Fasa, Fundiciones de Alsasua, por haber avalado un crédito de 81 millones de las antiguas pesetas.
Sinceramente no entiendo de política, solo tengo mis ideas, pero lo cierto es que fue destituido como Presidente de la Diputación Foral y en Octubre de 1983 el Tribunal Supremo anuló el Acuerdo de la Diputación por el que se destituía como Presidente al Sr. D. Jaime Ignacio Del Burgo, y en Enero de 1984 la Sala de lo Contencioso Administrativo de la Audiencia Territorial, ordenó su reposición. Sigue trabajando en su despacho, su patrimonio es equiparable al de cualquier trabajador de su clase y su currículum académico y profesional deja a la altura del betún a tantos y tantos advenedizos a la política regional y nacional.Animo desde estas humildes líneas que seguro encuentran quien las comparta, a que los políticos mencionados por haber recibido esas dietas, especialmente D. Miguel Sanz y Doña Yolanda Barcina, una vez de reconocer públicamente este error, devuelvan el dinero o lo entreguen a una ONG.
Detalle que serviría de atenuante (jamás eximente) para el recuerdo que de ellos se pueda tener en el plazo más o menos próximo en que se conviertan en ciudadanos de a pie.Es muy difícil corregir esta situación insostenible que vivimos en España y en particular en Navarra, simplemente porque falta voluntad verdadera para ello, estamos siempre con el “ y tu mas ó y tu también” y en definitiva el origen del daño es que no tenemos políticos que quieran lanzar la primera piedra, tal vez porque no están libres de pecado.M.F.L.