Ni un paso atrás contra la violencia de género

Hace escasas semanas que hemos conocido los datos del informe del Observatorio contra la Violencia Doméstica y de Género, con sede en el Consejo General del Poder Judicial, correspondientes a 2013. Según éste, Navarra es la comunidad que registra la mayor tasa de retirada de denuncias por este concepto, un 27,24% frente al 12,25% de media estatal. Es decir, más del doble. Igualmente, nos preocupa el hecho de que en la Comunidad Foral se presentaron 37,68 denuncias por cada 10.000 mujeres, una cifra muy inferior a la media que fue de 52,18, lo que nos hace sospechar que, aun pudiendo existir más motivos, es relativamente bajo el número de mujeres que se atreven a denunciar a su agresor.

Sin duda, no se puede responsabilizar de esta situación a aquellas mujeres que retiran sus denuncias ni tampoco a las que no se atreven a presentarlas por miedo. Un informe reciente de Amnistía Internacional manifiesta que: "En lugar de justificar la inacción de las instituciones descargando en las víctimas la obligación de denunciar, las autoridades deben verificar la efectividad de la protección legal impuesta e identificar los obstáculos que, en la ley o en su aplicación, impide a las mujeres acceder y obtener justicia y protección". Asimismo, en su Memoria anual correspondiente a 2013, el CGPJ asegura que "es necesaria una mayor implicación del entorno familiar y social y de los poderes públicos, especialmente en los aspectos preventivos".

Consideramos por tanto esencial la elaboración de un protocolo específico de acompañamiento, seguimiento y apoyo a aquellas mujeres que han reunido el valor suficiente para denunciar a su agresor, de tal forma que, en la medida de lo posible, se reduzca el número de aquéllas que, habiendo sufrido malos tratos, terminan retirando la denuncia, con el consiguiente paso atrás en su situación personal y familiar y en ocasiones de riesgo para su propia vida. Igualmente creemos necesaria la elaboración de un estudio que nos permita conocer los motivos por los que se producen estas renuncias y de porqué en Navarra la tasa dobla la media estatal.

En nuestra localidad, Barañáin, 23 mujeres presentaron denuncias por violencia de género durante 2013 si nos atenemos únicamente a datos de Policía Municipal. Ante una lacra tan execrable, que nos afecta a todos/as como sociedad, no podemos permitir que ninguna denuncia caiga en saco roto.

Los autores Beatriz Guruceláin, Eduardo de las Heras y Ioseba Uriz, concejales de Nafarroa Bai en Barañáin