Día Internacional de la Homeopatía
El 10 de abril se celebra el Día Internacional de la Homeopatía. Tristemente este año hemos sufrido un ataque dentro de una campaña de acoso y derribo por parte de los Ministerios de Sanidad, Consumo y de Bienestar Social, y de Ciencia, Innovación y Universidades, desde que presentaron el Plan para la Protección de la Salud frente a las Pseudoterapias. Lo que hasta ahora se ha denominado Terapias naturales, quieren que pasen todas ellas a ser pseudoterapias. Hasta el momento han declarado como tales 73 y están sin clasificar 66, entre las que se encuentra la homeopatía. Para dicho plan no se consultó con profesionales de la medicina ni con quienes nos tratamos con ella. Esto es un poco extraño, más aún cuando quien lo promueve es una asociación (APETP) en la que no hay ninguna persona del mundo sanitario. Se crea un plan para protegernos de un tipo de medicina con el que estamos muy satisfechas porque tenemos buenos resultados y sin efectos secundarios.
La Organización Mundial de la Salud recomienda la incorporación de las terapias no convencionales a la formación, la investigación y la atención sanitaria en todos los países del mundo (Estrategia de la OMS sobre medicina tradicional 20 014-2023). Las terapias naturales o complementarias están reconocidas en la Unión Europea por el Parlamento y por la Comisión, e implementadas en la sanidad pública de varios de sus países.
¿Y qué hacen el resto de países europeos respecto a la homeopatía? Veamos algunos de ellos extraídos de la Federación Europea de Pacientes de Homeopatía. En Austria la Österreic chische Ärztekammer (ÖÄK) da un diploma en homeopatía y medicina complementaria a todos los médicos que hayan aprobado un curso sobre Homeopatía. Sólo médicos pueden ser homeópatas. Hay 2 centros de enseñanza, la Ärztege esellschaft für Klassische Homöopatthie y la Österreichische Ges sellschaft für Homöopathische Mediizin. El 66% de los pacientes usan o han usado la homeopatía. El 72% considera la homeopatía como tratamiento efectivo. En Bélgica grandes aseguradoras como Partena o Liberal Mutuality cubren la homeopatía, tanto o la visita como los medicamentos. En Bulgaria, médicos, dentistas y veterinarios pueden practicar la homeopatía. En Francia sólo médicos pueden ser homeópatas y la homeopatía está cubierta por la Seguridad Social. El 74% de los pacientes apoyan el uso de la homeopatía y está a favor de que la Seguridad Social lo cubra. Alemania tiene el sistema de Seguridad Social a través de empresas privadas, hay a elegir, pero la mayoría cubren citas y una cuota anual de medicinas homeopáticas. En Hungría sólo los médicos pueden practicar la homeopatía, la medicina antroposófica, la medicina tradicional china, la medicina tradicional tibetana, la medicina ayurvédica y la medicina manual. Hoy día más de un tercio de los médicos ofrecen tratamiento homeopático pero no lo cubre la Seguridad Social. Países Bajos cuenta con un sistema muy complejo de Seguridad Social (fundos) y de los 63 seguros privados, 34 cubren la homeopatía. En Suiza la homeopatía está integrada dentro de la Seguridad Social, de tal modo que el médico q que te atiende te receta el tipo de medicamento que considere más adecuado, homeopático o alopático. La gran mayoría de las aseguradoras también lo cubren.
Este gobierno tendría dónde mirar y dónde aprender, pero en lugar de ello, fue a Europa a solicitar una modificación en la legislación actual sobre los medicamentos homeopáticos, en solitario porque ningún otro país ha pedido algo similar. La Comisión Europea rechazó dicha petición. Los medicamentos homeopáticos son medicamentos legales y de venta exclusiva en farmacias.
Las usuarias y usuarios de homeopatía defendemos nuestro derecho sobre nuestra salud y a elegir el tipo de medicina que queramos utilizar, así lo establece la Carta Europea de los Derechos de los Pacientes, cuyo artículo quinto ratifica esta libertad de elección. La ley 41/2002 básica reguladora de la autonomía del paciente, que establece como principio o básico en su artículo 2.3, que “el paciente o usuario tiene derecho a decidir libremente, después de recibir la información adecuada, entre las opciones clínicas disponibles” también nos ampara.
Por último, queremos comentar que muchas de las personas que se tratan con homeopatía lo hacen tras una experiencia poca o muy poca satisfactoria con la medicina alopática y sus efectos adversos. Uno de los ejemplos que mejor ilustra este hecho es el que hace referencia a las personas que han tenido infecciones respiratorias (o de otro tipo) persistentes y repetitivas a lo largo de bastante tiempo. Muchas de éstas se han visto abocadas a utilizar los antibióticos como único remedio. Para evitar su desmesurado uso con preocupantes efectos secundarios ya conocidos y admitidos, la homeopatía ha sido uno de los mejores recursos que estas personas han podido utilizar.
Estamos a favor de que se proteja la salud de las personas y se regulen todas las medicinas, así como que se invierta en investigación. Mientras tanto, seguiremos uniéndonos como personas usuarias en nuestras asociaciones, abriendo o en nuevos territorios y trabajando juntos en la Plataforma Estatal de Pacientes de Homeopatía que creamos en diciembre y en la Federación Europea de Pacientes de Homeopatía a la que pertenecemos desde octubre del año pasado.
Firman este artículo: Marisa Aristu Areopagita, Arantza Guruceaga Zubillaga y Iosu Gulina Del Pueyo Miembros de la Junta de gobierno de la Asociación de Usuarias y Usuarios de Homeopatía Similia Nafarroa-Navarra