Estamos sufriendo uno de los episodios de calor más intensos y prolongados desde que hay registros. Las altas temperaturas y la falta de lluvias, además de favorecer la aparición de incendios, también están mermando las reservas de agua al nivel más bajo de la última década en esta época del año. Una situación por la que cerca de la mitad de Europa se encuentra en situación de riesgo, especialmente en Francia, donde prácticamente todos los departamentos están en alerta. Como consecuencia del descenso del caudal de embalses y manantiales varios ayuntamientos navarros han acordado también restricciones en el riego de zonas verdes y jardines que ya están afectando a localidades pertenecientes a la Mancomunidad del Moncayo que, además, han pedido a sus vecinos un consumo de agua muy escrupuloso. Y en varios concejos del Valle de Erro el estiaje de uno de los manantiales ha obligado a recortar el agua de riego. Más dramática es la situación de Catalunya donde la Generalitat ha limitado en 150 municipios catalanes el consumo del agua a 200 litros por persona al día. En el caso de Pamplona y Comarca no hay problemas de suministro ni para riego ni para boca al tener el “privilegio” de contar con tres fuentes, tal y como afirma su presidente David Campión que no por ello también apela a una consumo responsable. La falta de precipitaciones ha disminuido la aportación del manantial de Arteta de forma notable -por debajo de los 600 litros por segundo (la Mancomunidad de la Comarca de Pamplona ha activado la situación de prealerta)- y con el fin de preservar el embalse de Eugi se ha recurrido antes que nunca al agua del tándem Itoiz-Canal de Navarra que ya está aportando una cantidad superior (entorno a 623 litros por segundo) a la que llega de los montes de Urbasa Andía, lo que viene a duplicar el flujo extra que se necesita por estas mismas fechas en los últimos años. El déficit de agua obliga a las administraciones (ayuntamientos en el ámbito comarcal) a no esperar a que avance el verano para implementar medidas de control de riego en jardines con agua potable. También a la ciudadanía para no dejar el grifo abierto en exceso y limitar el uso del agua. Tampoco estaría de más promover campañas de concienciación (consejos para ahorrar y reutilizar el agua) para darnos cuenta de que el agua, cada vez más, es un recurso escaso.