El próximo miércoles 20 de noviembre serán las votaciones para conformar la Asamblea de la Federación Navarra de Caza. El actual presidente lleva 24 años al frente de dicha Federación, a pesar de que en sus estatutos se aprobó una limitación de mandato a tres legislaturas (artículo 24).

Del mismo modo que hemos agradecido y valorado los aciertos y la labor que ha realizado en todos estos años, también hemos criticado, en alguna ocasión, una dudosa transparencia y una gestión claramente mejorable.

Nos presentamos a estas elecciones con ilusión y con ganas de encarar los retos a los que nos enfrentamos, buscando el consenso en los objetivos y en las reivindicaciones, para trabajar desde la unidad de nuestro colectivo.

La caza es y debe ser una actividad que contribuya a la conservación del patrimonio natural y al desarrollo socioeconómico del mundo rural. Los cazadores debemos realizar esta actividad sostenible para mejorar la conservación y el aprovechamiento de las especies y los ecosistemas. Tenemos que seguir siendo los principales actores en el control de las especies cinegéticas que generan daños en la agricultura, problemas sanitarios en la ganadería y accidentes en carreteras.

Debemos poner en valor la caza entre los jóvenes y entre quienes no tienen contacto con la naturaleza, mostrándola como una actividad noble y necesaria. Tenemos que combatir los bulos y falacias con que nos atacan desde grupos de presión anticaza, porque como dijo Miguel Delibes: “Un cazador es un ecologista con conocimiento de causa, no un ecologista romántico”. Y también hemos de trabajar para que las normas que emanan, tanto desde nuestra Administración Foral como desde Bruselas, no sean imposiciones políticas sino leyes consensuadas por todos los actores.

¡Viva la caza!