Sin clases de odio

Resulta hiriente leer noticias que atacan la educación que has recibido tachando a tu escuela y a tus profesores de "filoterroristas" y adoctrinadores.

Las personas que hemos estudiado en el modelo D navarro (todo en euskara salvo la asignatura de Lengua castellana, inglés y francés) nos preguntamos si verter acusaciones como esas no tiene consecuencias jurídicas. También nos planteamos cuál es la legalidad de una investigación policial de carácter generalizado dirigida contra toda una parte de la comunidad educativa solo por su condición lingüística o cultural que llega a inmiscuirse en su vida familiar.

Consideramos que olvidando que representa a toda una sociedad y con tal de eclipsar sus propios problemas, el Gobierno de Navarra juega a una ambigüedad interesada que no ejercería para otros casos.

Sin embargo, creemos que en esta ocasión la tergiversación ha sobrepasado una raya que no estamos dispuestos a aceptar. Absténganse de una vez de dañar la imagen de un modelo educativo que para sí quisieran otros.

Como en cualquier otro colegio, en los nuestros hay profesores con diferentes ideologías y como en cualquier otro lugar, los padres eligen los centros con libertad. Pero nosotros no hemos recibido clases de odio. Solo pedimos que quien posee la responsabilidad de divulgar información a miles de personas tampoco las imparta.