Soy un ciudadano normal que paga sus impuestos como otro cualquiera. En estos tiempos tan cambiantes que nos ha tocado vivir, quiero opinar sobre temas económicos y políticos.

Económico: pagamos impuestos por todo. ¿Cómo nos lo administran nuestros políticos? El Gobierno que está en el poder es de Unión del Pueblo Navarro (demasiados años en él). En su tiempo decidieron derrochar como los faraones: autovías, pantanos de Yesa o Itoitz, museos, recintos deportivos como el Reyno Navarra Arena o el Circuito de Navarra de Los Arcos, aeropuerto, canal de Navarra, tren de alta velocidad y un largo etcétera. Cuantiosos gastos, endeudándonos para muchas generaciones futuras. Todo esto ¿para qué? Solamente para enriquecerse unos pocos.

Político: si en lo económico ha sido un gran desastre, en lo político no va por mejor camino. Desmantelamiento de la Can, dietas y sobresueldos cuantiosísimos de los mandatarios, recortes en sanidad, educación, justicia, servicios sociales y demás entes públicas. Criminalización de cualquier protesta popular, investigaciones a profesorado del modelo D situándolos casi a la altura de los terroristas más buscados... Soy vasco-navarro. Sí, aunque a más de uno le suene raro, vasco y navarro, y veo que el partido gobernante (en minoría) odia todo lo referente al euskara, nuestra lengua milenaria. Vamos, un tesoro, aunque ellos digan (y ya les gustaría) que es un dialecto o simplemente una anécdota folclórica de estas tierras.

Por favor señora Barcina, no nos asuste con alarmas de conquista que vienen los vascos. Apréndase, o repásela que parece que la tiene olvidada, y verá que los vascos ni vienen ni se van, sino que estuvieron, están y estarán mal que le pese a usted. Parece ser que la doctrina de su partido (en palabras de su fundador, señor Aizpún), es que por cada navarro que aprenda euskara perdemos un voto. Por lo tanto, poniendo trabas y quitando apoyos más tiempo viviremos de nuestras falacias. De lo que se deduce que su escenario ideal sería uno sin la lingua navarrorum.

Gobierno de UPN, ¡dimitid ya! Vaya Navarra que nos estáis dejando, más que Navarra parece ser vuestro cortijo.