Agradecimiento a Padre Menni y a mi familia
Tras 21 años de enfermedad mental, con 10 intentos autolíticos, degradación mental, enajenaciones mentales y disgustos terribles que casi me cuestan la vida y años y años de malas noches para mis aitas y mi adorable hermana, me siento fuerte, hombre adulto, culto, con empatía para darles las gracias.
A todos los médicos que me han tratado, con mención especial para Javier Aztarain. Qué gran persona. Al doctor Landecho, ¡qué gran profesional! Bellísima persona y gran amigo mío hasta su muerte. Al doctor Jorge Aguirre. Al psiquiatra que más me ha visto crecer como persona, Carlos Loizaga. Gracias a la mejor psicóloga que he tenido en mi vida, que me ha hecho un hombre de provecho para embarcarme en mis proyectos que hace unos años eran imposibles: el libro que escribí, cursillos del Inem, del Inserta, las charlas que doy a mis compañeros y auxiliares en Padre Menni, las ganas de vivir y remontar los momentos malos. De ser una persona independiente, un ser maduro. Gracias, mil gracias, Marta Vallés. Gracias a esa amatxi que me ha enseñado a sacrificarme y a luchar día a día la vida. Gracias, hermana. Te quiero por todo lo que has hecho por mí en la vida, por tus sacrificios. Maite zaitut. A vosotros dos, mi parejita de sobrinos. Me habéis dado otra perspectiva de la vida que, con vosotros, tiene muchos más alicientes. Maite zaituztet. A ti, Iñigo, cuñado. A todo Padre Menni, todas las enfermeras, equipo de pastoral, sor Cristina, Alicia, Mª José, Ana, Marta Alameda, Maite Blázquez, Leticia, etc. Gracias por hacerme avanzar en la vida mucho más de lo que yo pensaba. Mil gracias. Y por último, gracias a mi difunto aitatxi, Teo, que hizo tanto por mí. Te querré siempre aitatxo. Gracias a Dios y a la Virgen de la Milagrosa por la fe que se me ha otorgado en esta vida de sacrificio, esfuerzo y superación. Os quiero a todos y todas. Maite zaituztet.