El pasado domingo 10 de febrero, los medios de comunicación nos han ofrecido asistir casi en directo, a la archimanifa que a todo bombo, platillo y parafernalia, se han pegado los franquistas en Madrid. Archimanifa que les ha salido rana, porque lo que iba a ser la archimanifa de las archimanifas, no ha pasado de manifilla. ¿Y saben ustedes por qué? Porque estos franquistas de nuevo cuño de han olvidado de Franco. Para rato Franco iba a fracasar en una manifestación como esa. Para rato se iba a descuidar en un detalle tan importante como el que se les ha escapado a estos.

Recuerdo y añoro cómo Franco organizaba las cosas con el mayor cuidado y generosidad y para una manifestación como es debido, no reclutaba a sus tropas solamente con un viaje en autobús pagado, completaba la oferta con un bocadillo y ¡qué bocadillos aquellos del Caudillo! Algunos hasta de jamón serrano.

Estos franquistas baratos han querido ahorrarse el bocadillo y les ha salido una caca de manifestación. Se lo tienen bien merecido, por agarraos.