La gran cantidad de paseantes que disfrutamos diariamente del saludable y precioso trayecto que conduce de la Txantrea Magdalena a nuestra Vieja Iruña, constatamos el absoluto abandono en el que se encuentran todas las zonas verdes. Esto ha sido denunciado por toda la oposición en la comisión de Urbanismo, obteniendo peregrinas y ridículas respuestas por parte del concejal delegado de la extinta Navarra Suma.

Es otro exponente más de la pésima gestión de Navarra resta que ahora sólo suma en disparates, desidia, incompetencia y despilfarro en el equipo municipal del Ayuntamiento que nos toca sufrir.

Todas las zonas verdes y medianas de este parque de Irubide y la Magdalena fueron diseñadas en la anterior legislatura por reconocidos paisajistas que buscaban zonas con biodiversidad y mantenimiento sostenible. La problemática de su mal estado radica en que no hay ningún mantenimiento como lo constatamos la ciudadanía. Además, la ciudad está cada vez más sucia y urgen serias campañas de urbanidad.

Está claro que el área de Conservación Urbana está muy mal gestionada y que la empresa urbanizadora es también una jetas que solo está para sacar tajada como siempre. Y, mientras, la ciudadanía perdemos calidad de vida, recursos y dinero.

Esperemos que con la primavera llegue la vida a nuestra Pamplona y volvamos a tener un ayuntamiento que nos infunda alegría y renovación.