Tras leer “El esqueleto consolida el macro pabellón deportivo de Buztintxuri” el 15/04/23 en el Diario de Navarra en papel. “Pabellón diseñado para adoptar diversas soluciones de ahorro energético mediante estrategias pasivas (alto aislamiento térmico, elementos de control solar, ventilación con recuperación de calor, alta hermeticidad...) unidas al uso de renovables (aerotermia y fotovoltaica).” Con la mayor instalación fotovoltaica hasta el momento sobre un edificio de Pamplona. Lo primero que se me ocurre es felicitar a este ayuntamiento por su apuesta por las renovables y el ahorro energético.

Pero como portero del Polideportivo Iribarren en Ermitagaña estoy obligado a denunciar el despilfarro en factura de gas, pagado por la ciudadanía, desde hace años en Iribarren en dos tubos de más de 40 metros y tres pulgadas, por los que siempre, días de calor y de frío, pasa liquido calotrasportador a más de 60 grados. Tubos que dejaron sin aislar después de un cambio a calderas de gas. Antes los tubos similares estaban todos aislados.

Situación ampliamente denunciada y desoída basándose en informes técnicos que van cambiando, siempre omiten varios artículos del RITE (Reglamento de instalaciones térmicas en los edificios) que esta instalación incumple y sobre todo, informes que van contra el sentido común que nos dice que nadie aguantaríamos, ni habríamos pagado, una obra que nos deja una gran calefacción encendida en nuestra casa, nuestro despacho municipal o cerca de ellos, tanto en verano como en invierno.

*El autor es auxiliar de funcionamiento del Polideportivo Iribarren