Personalmente tengo mucho respeto a la primavera, porque hace sufrir mucho de belleza. Los bulbos tristes, enterrados, explotan en flor, en colores inauditos, en tulipanes de toda clase de colores. En las ramas de los árboles, aparentemente secos, asoman capullos de hojas verdes que recogen el rocío de la mañana. Creo que el que mejor lo resumió fue ¡como no! Pablo Neruda con aquella frase memorable y sencilla, de las mejores que ha creado el ser humano: “Quiero hacer contigo, lo que hace la primavera con los cerezos”. Esencia pura del tiempo. Poesía.