‘Skin care’, ¿moda o peligro?
Según un estudio dermatológico, el uso de productos de cosmética en edades tempranas ha aumentado un 30% en los últimos cinco años, en comparación con los productos de higiene personal. La preocupación por el cuidado del cutis infantil, sobre todo en el sector femenino, ha crecido a un ritmo vertiginoso.
Una de las estrategias más utilizadas para aumentar el interés de las niñas hacia estos productos es la imagen que tienen éstos. Hacen los envases caprichosos, de una manera atractiva para llamar la atención. Por ejemplo, los colores que utilizan pueden ser sus favoritos. No saben que los componentes de estos cosméticos van dirigidos a un público de otras edades.
Lo que cambian es el exterior, que lo adaptan según el comprador. Otro de los motivos de la compra de estos cosméticos en menores es debido a la tendencia de ellos en las redes sociales. Ya que, últimamente se ha puesto de moda en aplicaciones, como Tik Tok e Instagram ver videos de famosos haciendo su rutina diaria de cuidado de la piel.
Si este aumento en el uso de productos cosméticos para niños sigue creciendo sin la debida regulación, podría haber un impacto negativo a largo plazo. Además, debido a la mayor sensibilidad de la piel infantil, según estudios recientes, los niños tienen un 60% más de probabilidad de desarrollar alergias a los ingredientes de estos productos, en comparación con los adultos. Incluso las irritaciones y alergias a ciertos componentes podrían convertirse en problemas en la infancia, afectando a su salud dermatológica.
En mi opinión, este problema no creo que se genere por culpa de los niños, que no son conscientes de las consecuencias que puede traer su utilización, si no, principalmente porque los padres les compran estos productos a sus hijos sin tener en cuenta el daño que les puede llegar a causar. Sobre todo, los laboratorios cosméticos no deberían priorizar el número de ventas de los productos al peligro que conlleva su uso en esas edades tan tempranas.