Buñuel, historia y vitalidad ribera

Esta acogedora localidad ribera, situada a orillas del Ebro, no deja de sorprendernos en los últimos años, por su actividad deportiva, social y cultural, donde unen lo lúdico con la historia, logrando actos y recreaciones amenas y de éxito, en su ánimo de guardar con orgullo la historia mirando al futuro. A ello hay que añadir su hospitalidad, que hace que vuelvas. 

El sábado, día 31, tendrá lugar una interesante recreación de un hecho histórico que nos lleva al año 1494, se trata de la recreación de la Orden de los Reyes de Nabarra al Merino de Tudela para la Recuperación del Castillo de Buñuel. Un hecho por el que merece visitar Buñuel. 

El año pasado nos sorprendieron con otra recreación histórica: la compra del Castillo por el rey Sancho VII, un exitoso acto por su representación medieval, el ambiente que se vivió en desfiles, así como la participación ciudadana durante la jornada, entre ellos, la comida popular, música medieval, charlas, a la que acudieron gentes de distintas zonas del Viejo Reino. 

En el año 2020 año organizaron un histórico partido de pelota vasca con dos de los mejores pelotaris profesionales del momento, Ezkurdia-Irribarria, hecho que tenía lugar por primera vez en la Ribera y que ocupó páginas de prensa en los principales periódicos con titulares como “Buñuel, capital de la Ribera”, así como un reportaje de ETB, además de la retransmisión. Vendieron todas las entradas nada más sacarlas. El pelotari Barriola y el periodista Urkiola estaban asombrados del ambiente deportivo y festivo, comentando que se escuchaba euskera. Los que acudimos al día siguiente pudimos disfrutar del entorno festivo y sorprendernos con los restos de los bienes arquitectónicos como el viejo trinkete donde ya se jugaba a pelota en 1694. Se construyó tras caerse la torre de la iglesia románica, similar a la de Cabanillas, contra cuya pared jugaban a pelota en siglos precedentes. Enfrente estuvieron los Antiguos Graneros del rey Sancho VII el Fuerte (1194-1234). Posteriormente tuvo lugar una exitosa conferencia de Santiago Lesmes sobre cómo se jugaba a pelota en Buñuel hace 400 años. Lesmes Zabalegui es autor del documentado y ameno libro La increíble historia de la pelota vasca.

Posteriormente han ido organizando con éxito otros encuentros pelotazales como el Campeonato de Euskal Herria de Bote Luzea y otros partidos de mano en los que han intervenido pelotaris de primer nivel como Urrutikoetxea, Larrazabal y otros, además de otros partidos de profesionales donde jugó el pelotari Cuairan de la vecina Cortes, entre otros.

Lo mismo ocurre con otros eventos culturales, como traer grupos musicales como Celtas Cortos, además de todo lo que sea por impulsar la calidad de vida de los buñueleros y buñueleras o visitantes. Durante la pandemia destacaron por su ofrecimiento a los ciudadanos, mejora del centro de ancianos y otras infraestructuras. El ambiente de las fiestas de San Antón es para vivirlo.

Una labor que continúan desde el Archivo Histórico local, entre otros, iniciada por la corporación de la anterior legislatura, donde la alcaldesa, Mayte Espinosa, indicaba en 2020 que era un sueño hecho realidad, a la que contribuyeron los concejales Alfonso Bordonaba, Israel Jacoste, Yasone Arrieta, Toño, Itziar, Iñigo… En el entorno de Buñuel quedan nombres en euskera: Muga, Gelbelzu, Latalor, Azpeiti, Oñate, Modorra, Leoz… Buñuel se sumó a la campaña del Gobierno de Nabarra para ofrecer euskera a los niños, “Buñueldik zerura! (de Buñuel al cielo)”, “Regálales el euskera y llegarán muy alto”.

Comentaba la alcaldesa, Mayte Espinosa, que hablar dos idiomas le ha resultado beneficioso para relacionarse, optar a puestos de trabajo, etcétera, añadiendo que al ser el euskera algo nuestro, quería que su hija tuviese esa oportunidad enriquecedora. Una buena oportunidad para visitar la Ribera, y disfrutar de sus productos, entre ellos, el espárrago, verdadero manjar.