Síguenos en redes sociales:

Con el INSS hemos topado

Con el INSS hemos topadoGoogle Maps

Algo no va bien cuando uno está de baja y acaba viviendo un auténtico calvario. Nadie decide por gusto padecer enfermedades terribles que convierten su existencia en un infierno. No somos considerados pacientes con necesidades sino que se nos identifica por números y siglas. Detrás de los fríos datos administrativos existen personas que tienen que lidiar con obstáculos en un vía crucis indescriptible. Imposible recuperarse física y mentalmente debido a la presión insoportable sufrida. Hay que dedicar mucho tiempo en escudriñar en la carpeta de salud: citas y pruebas pendientes, listas de espera, reclamación de informes, historial clínico.

Y entras en la rueda de la lucha por tus derechos: toca lidiar con el INSS, mutuas, asesores laborales, empresas, Salud Laboral, Osasunbidea, especialistas, médicos…

Tu vida gira en torno a una infinidad de actos que debes realizar (consultas, demandas, escritos, instancias, llamadas, peticiones, ruegos, suplicas, etcétera).

Un sinfín de términos van surgiendo en ese camino tortuoso: aceptación, acreditación, acuse de recibo, alegaciones, aprobación, baja laboral, baja médica, baremos, calificación, certificado, cita previa, coeficiente reductor, comunicación, confirmación, criterios, declaración, denegación, diagnóstico, dictamen, discapacidad, disconformidad, disfunción, disposición transitoria, documentación, documentos, duración máxima, emisión, evaluación, expediente , extinción, fallo, fecha límite, grado, identificación, incapacidad, incoación, información, informe de síntesis, informes médicos, instancia, juicio, jurisdicción, legitimación, legitimidad, normativa vigente, notificación, partes, patologías, periodos, petición, plazos, porcentajes, prestación, procedimiento, proceso, prolongación, prórroga, reclamación previa, reconocimiento, recurso, registro, regulación, requisitos, resguardo, resolución denegatoria, revisión, sentencia, silencio administrativo, síntomas, solicitud, subsidio, tramitación, trámites, validación, validez, valoración, verificación, vía jurisdiccional…

Qué fácil es juzgar a distancia a las personas sin mirarlas a los ojos, sin ninguna empatía, y decidir arruinarles la vida con decisiones administrativas tajantes. Dolor, sufrimiento, agotamiento, angustia, ansiedad, depresión, asombro, hastío, enfado, incertidumbre, incomprensión, miedo, ese es nuestro pan de cada día. Nos sentimos como parias, abandonados, desahuciados, desamparados, desbordados, ignorados, juzgados, maltratados, ninguneados.

La triste realidad es esta: mientras nos quede un soplo de vida tendremos que seguir trabajando y punto. C’est la vie!