Andoni Canela en los Golem

Los fotógrafos son unos artistas, en general. Los de prensa, por ejemplo, se pasan la vida corriendo de aquí para allá, dejando el coche tirado en segunda fila, llegando justos de tiempo a casi todas partes para luego tener que estar esperando hasta no se sabe cuándo para lograr esa instantánea del político de turno enfadado o contento, guapo o feo, según de qué vaya la noticia y el color del medio para el que trabajas. Esa imagen que va a valer más que mil palabras. Me imagino que el secreto de todo buen fotógrafo es precisamente reconocer la imagen que se está buscando y atraparla en la milésima de segundo en la que sucede.

Hoy, en Pamplona, en los cines Golem a las 20.00 h, vamos a tener la oportunidad de gozar con el trabajo de un gran fotógrafo, el tudelano Andoni Canela. Por suerte para él se dedica a retratar animales salvajes, pero de los de verdad, no de los que pisan moqueta todo el día en salas de plenos y sedes oficiales. Andoni y su pareja, la escritora-periodista Meritxell Margarit, junto con sus hijos Unai de nueve años y Amaia de tres, hicieron un viaje de quince meses a lo largo de los cincos continentes retratando siete especies amenazadas. Editaron un libro titulado La llamada del puma y ahora están presentando el documental El viaje de Unai en el que el niño es el narrador de la historia. La verdad es que tiene muy buena pinta porque por un lado nos dar a conocer las atrocidades que se están cometiendo contra la naturaleza y porque también nos invita a pensar sobre qué es y cómo debería ser la educación de los niños, porque seguro que Unai y Amaia han aprendido más en este viaje que en cientos de horas pegados a un pupitre.