os datos de recaudación pública siempre son un buen termómetro para medir la marcha de la economía en términos globales. Esta semana hemos conocido el dinero ingresado en la Hacienda Foral durante el primer semestre de 2021. Y las cifras, además de ser buenas, refuerzan los signos de recuperación que presenta Navarra en otros indicadores como el PIB. Pese a que la crisis provocada por la covid todavía sigue golpeando con dureza a algunos sectores, especialmente los relacionados con el ocio, lo cierto es que la recaudación en la primera mitad del año es un 32,9% más elevada que la de 2020. Un dato sin duda importante, si bien más significativo lo es el hecho de que supera en un 12,5% a la de 2019, que es el último ejercicio desarrollado sin pandemia. En total, han llegado a las arcas públicas la Comunidad Foral 1.727 millones. De ellos, el 43% se han ingresado a través de impuestos directos. En este capítulo, la aportación del IRPF - impuesto a través del que se han recaudado 619 millones- pone de manifesto el enorme peso que tienen las retenciones de trabajo, lo que viene a confirmar el aceptable comportamiento del empleo en un escenario complejo y todavía con incertidumbres. En el otro lado de la balanza continúa en el Impuesto de Sociedades, que sólo deja en la Hacienda Foral 75 millones, que apenas supone el 4,3% del total. S i los impuestos directos están estrechamente relacionados con el mercado de trabajo, los indirectos ofrecen mucha información del consumo. En este sentido, el crecimiento es sencillamente espectacular -alcanza el 59,94%- en comparación con el primer semestre de 2020, cuando el confinamiento imposibilitó hacer determinas compras durante casi dos meses. Si el pasado año, estos tributos aportaron 603 millones, ahora la cifra se ha disparado hasta 965. El mayor incremento porcentual procede del IVA, que ha recaudado un 81% más que el año pasado hasta llegar a los 699 millones. En los impuestos especiales, que han aportado un 17% más, el mayor crecimiento es el relativo al transporte, con un 136% más que en el primer semestre del año pasado, algo absolutamente lógico teniendo en cuenta las restricciones a la movilidad sufridas durante el estado de alarma. En este capítulo también han crecido los ingresos por hidrocarburos (4,2%), electricidad (6,86%) y tabaco (11,54%).