ontra el criterio de las direcciones de las escuelas infantiles municipales y sin ningún "rigor pedagógico" el Ayuntamiento de Pamplona ha decidido introducir actividades en inglés en los centros donde se va a ofertar para el año que viene la educación en euskera y castellano (Rochapea, Buztintxuri y Milagrosa), un experimento en realidad un nuevo recorte al mapa del euskera que se traduce en que solo Txantrea tendrá un modelo de inmersión lingüística puramente en euskera. En total serán cuatro de los doce centros donde las familias podrán elegir la presencia del euskera. Pero de esa manera. La apuesta de Navarra Suma por modelos mixtos esconde una estrategia perfectamente definida para no favorecer el euskera lo que por otro lado se gestiona sin planificación ni consenso. Es el reducto que tiene la coalición de derechas en materia educativa: doce centros de 0-3 que son la vía de entrada para muchas familias que quieren que sus hijos estudien posteriormente en el modelo D. ¿Que significa mezclar en un centro hasta tres modelos y en edades tan tempranas? ¿Terminarán todos hablando en castellano en el patio? ¿Cómo se organiza este híbrido? ¿Tendrán formación suficiente de los educadores para garantizarlo? ¿Quizá que el incentivo sea el inglés y no potenciar lengua en desventaja?. Por no hablar del reparto de modelos nada equitativo en los barrios. Evidente que el criterio no es técnico sino ideológico. Y que retrata al PSN en su apoyo.