Mucho se habla hoy de la ‘Ciudad 30’, en realidad señales en el suelo para moderar el tráfico y que tanto nos molestan. Habría que pensar -en su lugar- en tener ‘Ciudades 8-80’ que “protejan realmente a niños y ancianos (de 8 y de ochenta años)”. Comparto el discurso de Abel del Rey del colectivo Recicleta de Tudela, presente en el Foro Hiria sobre Movilidad en la Ribera organizado por DIARIO DE NOTICIAS. Difícilmente podemos legislar si no cambiamos de mentalidad. Si las puertas de los colegios y campos de fútbol están llenas de coches con padres y madres aparcados, por muchos carriles bicis que tengamos. Nos falta una “dimensión social” de la movilidad que pasa por entender el espacio público como un lugar “saludable y seguro”. Lograr que nuestros hijos puedan ir tranquilos a jugar al fútbol o a estudiar al conservatorio, y los abuelos salgan y entren de una residencia. Queda camino por recorrer, como lo fue la lucha contra el tabaco. La movilidad ha pasado de ser una lucha de “hippies”, muy “hostil” -que ha tenido “plazas complicadas como Pamplona” pero que ya nadie cuestiona la amabilización de muchas calles- a tener instituciones como la UE que “legislan a favor”. Recicleta regala bicis en Tudela, desde el colegio Griseras Cristina Sandúa organiza los ‘Biciviernes’, y los Biciclistas de Corella con Toño Peña al frente son capaces de unir a diferentes generaciones con las ‘yayacletas”. El abogado Jesús María Ramírez remata y defiende la ‘Ciudad de los 15 minutos’ donde todos los servicios básicos estén al alcance de todas las personas a pie o en bici. Supermanzanas sin coche. ¡Ciudades que algún día veremos!