Coeducación contra la LGTBIQfobia

Es innegable que en los últimos años se ha producido un gran cambio en la postura que hoy en día se tiene en torno a la diversidad afectivo-sexual y de género. Esta apuesta por la igualdad se ha dado tanto en el plano de la visibilidad como en el legal. Pero a pesar de estos avances, nos queda todavía un largo camino por recorrer. Según los datos recientemente conocidos, los casos por violencia machista denunciados están aumentando, así como los delitos por motivo de odio (en los que se engloban los ataques a la población LGTB).

Tanto en Navarra como en el la Comunidad Autónoma Vasca contamos con sendas leyes antidiscriminatorias aprobadas en 2009 y 2012 respectivamente. La aplicación de estas leyes, su desarrollo y el nivel de consecución de los objetivos se han llevado a cabo de una manera desigual e insuficiente. Loables objetivos, pero la realidad nos muestra otro panorama. En este momento en el Parlamento de Navarra se está debatiendo una nueva Ley Antidiscriminatoria, la cual tiene por objetivo sustituir a la anterior, corregir ciertos aspectos, y, lo que es más importante, intentar hacer llegar en el plano legal la igualdad real a todos los estamentos de la sociedad.

Euskal Herria no es una excepción en la lucha por la igualdad. Podemos encontrar tanto en otras comunidades autónomas como en otros países del mundo iniciativas y luchas similares, y en todas ellas un objetivo común: garantizar el derecho a ser visible y contar con una vida libre de violencias.

El que, como consecuencia de esta aceptación social, la educación afectivo-sexual y de género ? con todas sus diversidades ? esté entrando en los centros educativos ha sido contestado por un grupo conservador. Este ataque a la libertad sexual la han traducido en el envío a los centros educativos de un manual en la que llegan a afirmar que las leyes por la igualdad aprobadas son perversas y totalitarias. Tampoco escatiman calificativos al acusarnos de atacar la libertad de conciencia. Han iniciado en todos los centros educativos su particular cruzada contra los derechos de todas las personas y proponen a los centros el envío al Departamento de Educación de un texto en el que se recoge que la “administración pública se abstenga de imponer a los centros escolares la visión ideológica de las leyes autonómicas destinadas a promocionar diversidad sexual y modelos LGTBI”. Dicen acogerse a la Constitución Española para defender el derecho a que sus hijos reciban la formación religiosa y moral acorde con sus propias convicciones. Consideramos lamentable esta iniciativa, pero en ningún momento queremos obviar su posible efecto en determinados centros educativos. No es una iniciativa aislada, y determinados sectores de la iglesia católica ? en boca del arzobispo Cañizares ? han llegado a decir que "adoctrinar a los niños -en ideología de género es una maldad" y por si fuera poco, insta a la población a actuar y no cruzarse de brazos. Para todo esto, cuentan para su difusión con ciertos medios de comunicación afines. Esta nueva cruzada seguirá siendo publicitada e impulsada por los sectores más retrógrados de esta sociedad, por lo que es importante saber articular una respuesta adecuada.

steilas siempre ha defendido la libertad afectivo-sexual y de género, y una educación igualitaria, a pesar de los obstáculos que diariamente nos encontramos. Nuestro objetivo e instrumento es la coeducación, porque apostamos por dejar de lado una educación que perpetúe los roles, valores y posturas que, desde un punto de vista sexista, se han asignado a hombres y mujeres. Es decir, abogamos por dejar de lado los estereotipos tradicionales.

Tanto el Ayuntamiento de Iruña como el Parlamento de Navarra han aprobado sendas declaraciones contrarias a esta cruzada conservadora. Nos parece positivo que el Parlamento inste al Departamento de Educación para que tome medidas que eviten la no aplicación de las leyes de igualdad en los centros educativos. Este tipo de iniciativas son siempre bienvenidas, porque también son necesarias. Pero de las instituciones, de los Departamentos de Educación, deseamos otras respuestas. Si verdaderamente la coeducación y el tratamiento adecuado de las diversidades son un eje estratégico de Educación, deben ponerse los recursos necesarios para llevarlos a cabo, y es imprescindible comenzar por la formación de todas y todos los trabajadores de educación. Son necesarias tanto la concienciación como la formación. Hay que ir más allá de las palabras para poder responder a los ataques que día a día nos encontramos. Del mismo modo, también es importante hacer llegar a los centros educativos una apuesta firme por la diversidad y la exigencia de que el respeto a la diversidad esté en todo momento garantizado. Así viene recogido en las leyes y es la obligación de las y los responsables el asegurar que se cumplan.

Por nuestra parte, seguiremos trabajando por la coeducación con todo nuestro convencimiento y, en la medida de nuestras posibilidades, seguiremos realizando propuestas didácticas para trabajar con el alumnado y el profesorado. El mes pasado enviamos a los centros educativos una unidad didáctica para trabajar las violencias machistas en torno al 25 de Noviembre con el lema “Quiero ser libre, no valiente”. Este lema refleja fielmente el deseo que las mujeres y las personas LGTB tenemos. En ese camino no necesitamos el permiso de nadie, pero sí necesitamos un sistema educativo que verdaderamente tenga como eje la coeducación.