LA historia de este partido comenzó el jueves antes de que Muniain marcara el 1-3 en Old Trafford. Mañeru, rojillo y culé de pro, pronosticó un triunfo seguro: "Osasuna gana el domingo". Sobrado de razones, acertó. En este resultado también pudo influir algo Rebeca. Mi cuñada, una hora antes, en La casa del fútbol que montó Canal Plus en El Sadar, ganó al futbolín tres veces a un aficionado chileno del Athletic. Tanto Mañeru como Rebeca estaban convencidos de que iba a vencer Osasuna, como también lo expresó Óscar segundos antes de que Puñal ayudara en el primer tanto, al que gritó: "¡Qué no te has comido el bocadillo de macarrones!". Cebollero como él, Óscar brincó en el primer tanto. Pero su amigo Txema, que vino invitado a Graderío Sur, no mostró mucha ilusión. Era un infiltrado de los de Bielsa. Aunque este sentimiento no le impidió compartir, eso sí, resignado, nuestra alegría. Entre tanto, Óscar gritaba: "Bocadillo de macarrones, a la UEFA por..." (no es momento para incluir la palabra que hace la rima con la cena de Óscar). Graderío recordó a nuestros amigos vizcaínos que son más de Tajonar que de Lezama, y al pequeño de la Chantrea tampoco se le perdonó su capítulo digno de un Sálvame Deluxe. Tras el descanso, la melodía "esto no es Old Trafford, que es El Sadar" se escuchó en varias ocasiones. Y a esta victoria se unió ayer el nacimiento de Iraia, nueva rojilla del Komando Kantera.
