La sorpresa de los 500

Estaba Patxi Puñal un poco intrigado con la que se estaba montando en El Sadar. Cumplidor con los requerimientos de los medios de comunicación -aquí también hay un ejemplo-, el capitán de Osasuna estaba dispuesto a compartir con los aficionados sus sensaciones después del partido 500 y a hablar de la Liga, la Copa y estas cosas. Que la convocatoria fuese en El Sadar no le sonaba a normal, pero no indagó mucho más, aunque cuando llegó con el coche al estadio y no encontró sitio para aparcar y vehículos conocidos -de sus compañeros, por ejemplo- junto al recinto, la cosa empezaba a cobrar mala pinta.

Puñal entró en una abarrotada sala de prensa de El Sadar al ritmo de los aplausos de sus compañeros y con el espacio prácticamente lleno porque, además de los futbolistas, estaban los técnicos -con Javi Gracia a la cabeza-, una representación de la directiva con el presidente Archanco también, miembros de la Asociación Osasuna Veteranos, técnicos de la escuela de Tajonar -con el secretario técnico, Pedja Vasiljevic al frente-, empleados del club, el gerente, Ángel Vizcay, César Cruchaga, familiares -su hijo Oihan se dejó notar pronto-... Solito enfrente de la multitudinaria conferencia de prensa, Puñal -tipo frío, poco amigo de estos jaleos- reconoció que el martes, enfundándose la zamarra de Osasuna en su partido 500, estaba más tranquilo "porque ahora me estoy poniendo nervioso". Hubo una primera intervención al uso, en la que el futbolista respondió a algunas cuestiones, suficientes para expresar su absoluta gratitud por lo que está viviendo. "Estoy muy agradecido de que estéis todos aquí. De todo, el agradecido soy yo, de haber podido estar tantos domingos con esta camiseta. Poder disfrutar de esta trayectoria, cómo he disfrutado y sigo disfrutando...".

Lo que no se esperaba Puñal es lo que se le venía encima. El vídeo conmemorativo de los 500 partidos -preparado por el departamento de prensa del club- enseña intercalado con imágenes del jugador -un buen número de goles y otras acciones brillantes- todo un rosario de opiniones. Empieza su hermano -"estamos orgullosos de ti"-, sigue Candi -"500 veces gracias"-, continúa Oier -"eres un jugador de otro nivel"-, luego Damiá -"Patxi es un referente"-, Iker Casillas -"felicidades y que cumplas muchos más"-, Javier Aguirre -"con 200 partidos más estamos listos"-, Miguel Flaño -"encarnas los valores de Osasuna"-, César Cruchaga -"es un orgullo haber sido tu compañero"-, Pablo García -"no hay jugadores viejos o jóvenes, hay buenos y malos"- y Puyol -"que sigas disfrutando"-. Su mujer, María, y sus dos hijos terminan el vídeo como es la historia de Puñal en el fútbol: con sencillez y naturalidad, mandando besos y dedicándole un divertido "zorionak".

Un poco más azorado que al principio de la velada estaba un Patxi Puñal que, como todos los presentes, andaba con un nudo paseándose por la garganta y con un inusitado picor de ojos. "Estoy muy agradecido, se ha hecho lo que se ha podido pero he sido siempre consciente de la responsabilidad de ser capitán de Osasuna".

Después de echar una ojeada al vídeo, seguro que los aficionados más jóvenes cantan con más arraigo lo que ayer le jalearon al final de la comparecencia en El Sadar sus compañeros. "No podrán parar...".