público. La afición de Osasuna sigue siendo incondicional. Da igual que el club esté en bancarrota, que sus ex dirigentes estén imputados en delitos graves o que el equipo esté en peligro de descenso a Segunda B. Allí están ellos. Decenas de aficionados aprovecharon la Semana Santa para pasar unos días en Sevilla y acercarse hasta el estadio Benito Villamarín para apoyar al equipo rojillo. En la foto se ve a a alguno de ellos, que no cesaron de animar a su equipo en ningún momento del partido. Eso sí, cuando el equipo iba perdiendo tampoco se olvidaron de gritarles el característico slogans de “rojillos echadle huevos” y “Osasuna nunca se rinde”. Una vez más ellos sí se merecieron la nota alta del partido. Foto: Agencia LOF