el equipo - Parece que Osasuna ha subsanado temporalmente la vía de agua en su zona defensiva. Por segundo partido consecutivo mantuvo su marco a salvo y son ya 192 minutos imbatido. Pese a lo positivo del dato, la defensa ofreció ayer síntomas de inestabilidad, con un Aridane metido la mayoría de las ocasiones en problemas y dificultades en toda la línea para sacar la pelota ante la presión de un Numancia que provocó numerosas pérdidas.