Pamplona. El extremo de Osasuna Rober Ibáñez, que ayer se retiró antes de finalizar el entrenamiento al sentir unas molestias en el cuádriceps derecho, evoluciona "bien".

De esta manera, el jugador, que se ha sometido a una prueba médica antes del entrenamiento, es probable que pueda participar en el encuentro ante el Gimnástic de Tarragona, que se disputará este sábado en El Sadar.

En cualquier caso, tanto Ibáñez como el mediapunta Rubén García, que sufre una lesión en el recto anterior derecho y que continua en su proceso de recuperación, se probarán mañana, en las instalaciones de Tajonar, para comprobar si pueden estar disponibles para el técnico rojillo, Jagoba Arrasate.

No obstante, Arrasate no podrá contar con el delantero Juan Villar, que acumula cinco amarillas; el extremo Kike Barja y el defensa Manuel Castellano Lillo, ambos con lesiones en el músculo semimembranoso, y el centrocampista Luis Perea, que padece una rotura en el bíceps femoral derecho.