Pamplona - Osasuna ha conseguido cerrar la contratación en propiedad de Rubén García (Xátiva, Valencia, 14/7/1993) después de una ardua negociación con el Levante, que tenía la intención de repescar al futbolista a coste cero a partir del 1 de julio -posibilidad que había pactado el pasado verano cuando el mediapunta recaló en las filas rojillas-. A Osasuna le va a costar la operación 3 millones, cifra que se elevará 250.000 euros si el conjunto navarro salva la categoría la próxima temporada y en otros 250.000 si también logra la permanencia al curso siguiente, un desembolso considerable pero que colma el principal anhelo tanto de su cuerpo técnico, con Jagoba Arrasate a la cabeza, como de la afición, e incluso del propio jugador, cuyos deseos de continuar en Pamplona también han influido en el acuerdo.
En definitiva, se puede concluir que Rubén García sigue en Osasuna por unanimidad. La afición fue la primera en apostar por su continuidad y le expuso sus ilusiones a limpio cántico. “Rubén quédate”, le instaron los seguidores rojillos en El Sadar. Lo hicieron en multitud de ocasiones. También cuando plantilla, cuerpo técnico y directiva se pasearon por diferentes puntos emblemáticos de Pamplona para festejar el ascenso a Primera.
A su entrenador, Jagoba Arrasate, tampoco le han dolido prendas a la hora de alabar el rendimiento de Rubén García. “Ha sido nuestro jugador diferencial”, valoró en una reciente entrevista con este periódico, la misma en la que dejó clara su confianza en poder seguir contando con su concurso -también con el de Rober Ibáñez- en Primera División: “Si nosotros podemos pelear al máximo y el jugador tiene la voluntad de quedarse, siempre habrá más posibilidades y tenemos que intentar apurarlas por todos los medios porque Rubén y Rober son dos buenos jugadores en general, pero son dos grandes jugadores para Osasuna”.
Con la contratación en propiedad de Rubén García, los rojillos demuestran su apuesta por la continuidad del proyecto que tan buenos resultados ha obtenido este curso, personificados en los excelentes registros personales del ya ex del Levante, club con el que además acumula una dilatada experiencia en Primera División antes de su cesión al Sporting y su año mágico en Pamplona.-
