Pamplona - De palabra y de obra. Así ha sido y es hasta la fecha la apuesta de Jagoba Arrasate por la cantera de Osasuna desde que hace poco más de un año aterrizara en el banquillo del conjunto navarro. En su discurso siempre ha demostrado haber entendido la idiosincrasia del club en este sentido, y sus actos lo han refrendado, como quedó patente con su primer once como técnico rojillo, cuando en Palma alineó de salida a siete jugadores formados en Tajonar -seis de ellos navarros de nacimiento- y también con el que presentó ayer en Leganés en el retorno de Osasuna a la máxima categoría. Hasta cuatro canteranos encontraron acomodo en la alineación del preparador de Berriatua, incluido Jon Moncayola (Garínoain, 13/5/1998), que además se estrenó con el primer equipo rojillo en partido oficial, convirtiéndose en el quinto futbolista formado en Tajonar al que Arrasate da la alternativa en su todavía breve etapa como entrenador del conjunto navarro.
Al primero al que el actual técnico de Osasuna dio la alternativa fue Juan Pérez (Almudévar, Huesca, 15/7/1996), que disputó los dos partidos inaugurales del curso pasado en Segunda, eso sí, por las lesiones de Rubén y Sergio Herrera. También jugó el único duelo de Copa de los rojillos (1-2 contra el Reus), choque en el que se estrenó Endika Irigoien (Pamplona, 25/1/1997), que posteriormente también dispuso de algunos minutos en un par de encuentros ligueros. Y hasta el pasado sábado, los últimos en debutar con el primer equipo rojillo de la mano de Arrasate habían sido Javi Martínez (Ólvega, Soria, 22/121999) y Aimar Oroz (Pamplona, 27/11/2001), por los que apostó en los minutos finales del enfrentamiento contra el Córdoba, que acabó con triunfo de Osasuna (2-3) para sellar su título de campeón de Segunda una jornada antes de la conclusión de la competición liguera.
El último en asomarse a esa lista de canteranos que han debutado en el primer equipo con Arrasate como técnico ha sido Jon Moncayola, que el pasado sábado disfrutó en Leganés de un estreno inmejorable. El centrocampista de Garínoain, que ya el curso pasado entró hasta en cuatro convocatorias ligueras sin llegar a debutar, fue uno de los once elegidos por el entrenador vizcaíno para el reingreso de Osasuna en la máxima categoría, disputando el partido al completo (unos 98 minutos, teniendo en cuenta que el árbitro añadió dos en la primera parte y seis en la segunda) y desenvolviéndose con una tranquilidad impropia de un debutante.
La presencia de Moncayola en el once inicial resultó sorprendente, ya que, pese a las bajas, relegó al banquillo a futbolistas de la talla de Fran Mérida y Luis Perea, con más experiencia y trayectoria en la elite que el navarro. También resultó inesperada, aunque no por todos, ya que hace un par de años, cuando jugó con el Iruña en Tercera, su entrenador, Javier Ortigosa, ya alucinaba con las condiciones de un futbolista al que ya entonces le vaticinaba futuro en Primera. Como Moncayola, otros tres navarros y formados en Tajonar jugaron el partido completo contra el Leganés. Fueron David García, Oier y Roberto Torres, la prueba de que Arrasate cuenta con la cantera.
