pamplona - La primera fase de la reforma de El Sadar, que atañe a la grada de Preferencia, con todo lo que esto implica -asientos, vomitorios y accesos, pero también vestuarios, cabinas de prensa, oficinas, baños, zona mixta o zonas VIP-, termina hoy, con el primer partido de la temporada en el feudo rojillo.

Sin embargo, faltan por pulir algunos aspectos que en principio estarían terminados en esta primera fase, como por ejemplo los asientos del tramo superior de la grada de Preferencia, que siguen siendo de los viejos y que se cambiarán tras la visita del Barcelona, durante el lapso de tres semanas desde este hasta el siguiente partido de Osasuna como local. Aun así, el club rotulará de forma provisional tanto los asientos como las filas de Tribuna Alta con la nueva numeración, para que cada socio se siente en la butaca que indica su nuevo carnet de socio.

Todo lo fundamental para el desarrollo del partido, así como para su retransmisión televisiva, está a punto para la cita de hoy ante el Eibar. Destacan los vestuarios, con un segundo piso en el que hay una zona de activación -un habitáculo con césped artificial donde los jugadores podrán realizar un precalentamiento antes de saltar al verde a calentar- así como dos despachos, uno para el cuerpo médico y otro para Jagoba Arrasate.

También está terminado todo lo concerniente a los accesos a la Tribuna Alta, que ya no está conectada con los otros dos tramos de la grada de manera interna, sino que cuenta con sus propias puertas y escaleras para acceder desde el exterior.

La reforma de El Sadar se prolongará durante toda la temporada y está previsto que las obras concluyan el próximo verano.