TAJONAR. El jugador valenciano de Osasuna, Rubén García, ha indicado que su equipo debe seguir al pie del cañón lo que resta de temporada, ya que viene "un calendario bastante duro y difícil, por lo que tenemos que estar concentrados para afrontarlo al máximo".

En su comparecencia ante los medios de comunicación tras la sesión de entrenamiento ha estado presente la lesión de Chimy Ávila, que le hace ser baja para el resto de temporada. "Es una situación diferente, son momentos difíciles para él, y por ello todos estamos ayudándole para que nivel psicológico esté lo mejor posible", ha comentado.

Sobre cómo puede influir la falta del Chimy en el juego del equipo, ha indicado que el argentino es "un jugador que estaba dando mucho rendimiento en el campo con su esfuerzo, venciendo en muchas disputas más allá de los goles marcados".

"Hay gente con mucha ambición, con ganas de ayudar al equipo y que seguramente nos ayuden", ha destacado García sobre los jugadores ofensivos que ahora podrán contar con más minutos, a la vez que ha añadido que cuando han jugado sin el Chimy han estado "a la altura", siguiendo con su idea, por lo que confían "al 100 % en el resto de la plantilla".

Osasuna podría fichar a un nuevo ariete para sustituir al delantero, pero el jugador zurdo del club rojillo ha explicado que no es cosa suya, sino de la dirección deportiva y que tanto él como sus compañeros, deberán "desde dentro", aportar "su granito de arena".

"Nuestra filosofía seguirá siendo la misma. No creo que el míster porque falte un jugador vaya a cambiar el estilo ni la forma de entender nuestro fútbol", ha comentado el jugador que hasta la fecha lleva 6 goles facturados en LaLiga Santander, agregando que "más allá de un jugador, está el grupo".

"Tenemos una marca de puntos importante, ya que cuando sumas 30 sobre estas fechas es algo positivo, pero es evidente que queda mucho y que los equipos que van abajo se están reforzando para intentar dar ese empujón en el intenso mes y medio que viene por delante"

Del partido de octavos de final de Copa del Rey ante la Real Sociedad que disputarán en San Sebastián el miércoles, ha señalado que "es un regalo tener esta Copa, compitiendo de la forma en la que lo estamos haciendo", a la vez que ha avisado que no importa "la categoría y el nivel del rival", por lo que van irán "con la misma ambición de los equipos" que han jugado hasta ahora contra ellos.

"Vamos con confianza en poder pasar y con mucha ilusión de que podemos hacer algo bonito", ha expresado el jugador sobre su próximo partido, a la vez que ha definido a la Real como un "rival muy difícil" que en su campo se lo pondrá "complicado".

Osasuna ha vendido las 868 entradas para el partido que se disputará en el Reale Arena, y García ha declarado que "si hubiesen vendido la mitad de las localidades del campo también se hubiesen vendido porque el trayecto es fácil y si algo tiene nuestra afición es que siempre nos apoyan al máximo".

Será la quinta vez esta temporada que ambos conjuntos se enfrenten, ante lo que ha apuntado que Osasuna conoce "bastante bien a sus grandes jugadores y su peculiar estilo de juego" y tendrán que estudiarlos "un poco más para pasar a cuartos".

Sobre el partido de liga disputado en El Sadar, García ha aceptado que "casi no nos dieron tiempo de entrar en el partido", y que si algo dejó claro a los jugadores rojillos es que deberán salir "muy concentrados".

"Todos estamos preparadores para cuando el míster decida, son partidos muy cercanos que incluso a los futbolistas nos gusta entrenar menos y jugar mucho", ha manifestado Rubén sobre los dos partidos que encaran esta semana.

Sobre su temporada, se ha mostrado "contento por poder ayudar al equipo, ya que hacía tiempo que en Primera División no disputaba tantos minutos", poniendo de ejemplo la temporada pasada donde pudo encontrar ese punto de "madurez, confianza y de sentirte a gusto en el campo".