Cuando hay puntos en juego, el fútbol y la armonía navideña tienen mal encaje. Es lo que ocurrió en el Real Sociedad-Osasuna disputado en Atocha en la Nochebuena de 1939, la primera tras concluir la guerra.

El partido estuvo plagado de incidencias: el público local increpó a los rojillos y en particular a los hermanos Bienzobas, nativos de la ciudad; el árbitro consintió el juego duro de los locales; el portero osasunista Florenza fue expulsado por agredir a un contrario; y para rematar la felicitación navideña, menudearon las broncas entre aficionados de uno y otro equipo.

Hubo muchas broncas, bofetadas e intervención de los guardias de seguridad hasta que se desocupó el campo, ya finalizado el partido”, aportó el Arriba España.