La lesión del Chimy Ávila ha precipitado los acontecimientos para el refuerzo de la plantilla en la delantera. Los técnicos, Braulio y Cata, ya venían sondeando el mercado para incorporar a un jugador de banda con perfil también de delantero, pero a esa búsqueda se ha unido ahora la de un ariete específico, un punta nato. Es decir, a falta de un mes para el cierre del mercado, Osasuna está buscando dos delanteros, además de culminar la contratación del lateral izquierdo que complete el flanco tras el fichaje de Juan Cruz -el jugador del Atlético Manu Sánchez sigue en la recámara-.

La secretaría técnica ha elaborado una lista de posibles refuerzos para que Arrasate y Alkiza tomen decisiones acerca de la idoneidad de algunos de ellos. El mercado adquiere velocidad distinta cuando se acerca el inicio de la competición y la necesidad que tiene Osasuna también quiere ser aprovechada por los clubes. Ángel, el delantero del Getafe al que se ha asignado el interés del conjunto navarro, por ejemplo, tiene una imposible cláusula de diez millones de euros o Luis Suárez, el exjugador del Zaragoza que pertenece al Watford, también se mueve en unos parámetros prohibitivos. Hoy habrá una reunión de técnicos para definir objetivos.

Osasuna quiere darse prisa y contar con un delantero para el partido ante el Getafe, la próxima semana, en la segunda jornada de Liga.

En este contexto, en Argentina se afirmaba ayer que el club navarro ha iniciado los contactos para la contratación de Jonathan Calleri. El ariete argentino, con una larga trayectoria en su país (Boca Juniors) y en Alavés, Las Palmas y Espanyol, la pasada temporada, se encuentra con la carta de libertad para poder negociar. Este asunto no es baladí para Osasuna, que no tiene una disponibilidad económica excelente y que, además, se encuentra condicionado por las circunstancias propias de su plantilla que pesan en su coste y en el techo salarial. Chimy se pierde la temporada y Brandon muchos meses de competición y Darko, que hoy pasa por el quirófano, puede estar cuatro meses de baja. Todos ellos computan a efectos de coste de plantilla, pero no van a poder ser utilizados.

En el terreno de los interesantes, Arnaiz (Leganés) sigue ocupando un lugar preferente, pero las pretensiones de su equipo le colocan casi el cartel de intocable. El Leganés quiere cinco millones por él y eso, por ejemplo, ha frenado su salida a otros clubes, como el Valladolid.

A Osasuna le están llegando numerosos ofrecimientos de delanteros -Sandro es otro de los nombres que sugieren algunos medios digitales- y el mercado extranjero también está siendo rastreado. Alrededor de una decena de futbolistas figuran para este casting a la carrera.