A la par que Jagoba Arrasate estaba dando por válida la imagen del equipo, sin querer entrar a valorar la actuación arbitral, al otro lado de la sala de prensa, Braulio y Cata se enfrentaron al colegiado, Ricardo de Burgos Bengoetxea, "gritando y con actitud agresiva" tal y como recogió en el acta el colegiado del encuentro.

En el apartado de otras incidencias, el árbitro recogió que Braulio se dirigió a su persona con las palabras "esto es una vergüenza; nos vamos a segunda", teniendo que ser sujetado por miembros del club y por las fuerzas del orden público. Acto seguido, Cata, igual de alterado que Braulio, también tuvo que ser sujetado por miembros del club y fuerzas del orden público. Este último, fruto de su enfado, rompió un dispensador de gel y provocó un enfrentamiento con personal del Elche.

El acta del partido entre Elche y Osasuna.

Ambos, cierra el acta, "tuvieron que ser identificados por miembros del CNP".