PAMPLONA - A la socia Cristina Velasco Armendáriz no le cuesta demasiado rememorar la última vez que accedió a El Sadar para animar a Osasuna desde la grada: "Me acuerdo perfectamente del último partido. Fue contra el Espanyol. ¿Quién iba a imaginar entonces que ya no íbamos a volver durante todo un año?". En cualquier caso, ella tuvo la fortuna de poder visitar el estadio con motivo de la elaboración de este reportaje. Lo hizo el pasado miércoles por la tarde y salió con una sensación difícil de explicar con palabras: "Cuando volví a entrar y vi aquel campo tan espectacular e impresionante, dije: "Madre mía, si no parece El Sadar". Parece el campo de un equipo grande". Más o menos como se comportó Osasuna el pasado sábado ante el Barcelona pese a caer por 0-2 ante el equipo de Messi.
Lo que no oculta Cristina es su deseo de regresar a El Sadar cuanto antes, pero con la excusa de presenciar un partido de fútbol de Osasuna: "Tengo muchas ganas de verlo con público porque va a ser un auténtico fortín y seguro que va a haber un ambiente terrible". Ansía regresar porque poder volver será sinónimo de otra victoria más contra el coronavirus: "A ver si podemos volver pronto. Cuanto antes, mejor. Quiero animar al equipo y verlo en Primera División. Y también quiero que podamos seguir cantando al final de cada partido: "Somos un equipo, valiente y luchador, que defiende sus colores, con el corazón...". Eso es lo más bonito".
