El Promesas, con la pólvora mojada

Los navarros salieron al campo de Los Pajaritos con las cosas claras y sin ningún tipo de complejo ante un Numancia que quiso el balón desde el inicio. El primer disparo del partido lo protagonizó Xabi Huarte en el minuto 4, aunque el balón se marchó fuera. Siguió insistiendo el Promesas. Pau Martínez se quedó completamente solo ante Gaizka Ayesa, pero no supo definir y el balón salió rozando el palo. Dos ocasiones en los primeros diez minutos de encuentro.

Poco a poco, el conjunto soriano se fue despertando. Un disparo raso de Mancebo al borde del área fue su primer aviso. Luego, Carrillo probó fortuna desde la frontal del área en el minuto 23. Y Dani Sánchez no supo aprovechar un robo en el centro del campo de Cotán, que acabó con una asistencia a Mancebo y este dejó a Dani que falló ante el portero.

En el minuto 33, llegó el primer tanto del partido. Un córner lanzado por Carrillo acabó con un rechace defensivo y Jaume Pol engatilló un tremendo disparo desde la frontal que, con ayuda de un defensor rival, acabó con el balón dentro de la portería visitante. Y sin tiempo para reaccionar, los hombres de Santi Castillejo encajaron el segundo en una gran jugada de Carrillo que cedió a Mancebo y este, dentro del área, firmó el 2-0 para aumentar la ventaja sobre los rojillos.

Los de Tajonar pudieron acortar distancias antes del descanso en un penalti a favor. Sin embargo Gorka Ayesa detuvo el lanzamiento de Pau Martínez. El rechace fue para Iker Benito, que remató al poste. Así, el Promesas se marchó al vestuario con una desventaja de dos goles después de tener ocasiones claras para meterse en el partido.

Ya en la segunda mitad, Rubén Mesa no tardó en liquidar el partido con el tercer tanto al minuto de salir al terreno de juego. El delantero disparó desde fuera del área directo a la escuadra rival. Un auténtico jarro de agua fría para un Osasuna Promesas que salió al campo más respondón. Y en pleno festival del Numancia llegó el cuarto. Una asistencia de Carrillo desde el centro del campo lo aprovechó Dani Sánchez para picar el balón por encima del portero. En cuestión de 10 minutos, los de Castillejo se vieron con cuatro goles de diferencia, que parecían un mundo a media hora de finalizar el encuentro

El conjunto rojillo no bajó nunca los brazos. Osambela tuvo una buena oportunidad en el minuto 69. Y en la recta final del partido, el filial obtuvo el premio. Osambela, de cabeza, hizo el definitivo 4-1 con un remate de cabeza tras un tiro que rechazó en el larguero y así, no irse con la cuenta a 0 a Pamplona.