El presidente del Athletic, Jon Uriarte, y el director deportivo del club bilbaíno, Mikel González, comparecieron ayer en rueda de prensa para valorar un mercado de fichajes de invierno en el que el principal desembolso de la entidad vizcaína ha sido de dos millones de euros para pagar la cláusula del jugador de Osasuna Promesas Adama Boiro, extremo reconvertido en en lateral izquierdo de 21 años de edad (cumple 22 en junio). “Es un jugador de presente, pero especialmente para medio-largo plazo.

Le llevábamos tiempo viendo y teníamos clara su incorporación. El momento de hacerlo era ahora”, dijo González sobre un futbolista nacido en Dakar, capital de Senegal, aunque afincado en navarro desde muy pequeño. “Es un chico muy joven que tiene que ir poco a poco, pero al que le vemos como un jugador potencial de Primera División”, añadió. Este fin de semana jugó con el Bilbao Athletic en Segunda RFEF y dio una asistencia.