Los equipos de Osasuna y Cádiz lucieron en la tarde de ayer brazaletes negros en memoria de los guardias civiles fallecidos en Barbate en la lucha contra el narcotráfico, en una iniciativa que acordaron los dos clubes durante la semana, un hecho que apareció detallado el detalle en el apartado de observaciones de la hoja de alineaciones que ofreció LaLiga antes del encuentro de ayer.
Por otro lado, el club invitó al estadio a presenciar el encuentro a la viuda de una de las víctimas, residente en Sarriguren, junto con una docena de acompañantes, a los que los presidentes de ambos equipos, Luis Sabalza y Manuel Vizcaíno, entregaron sendas camisetas de los clubes, firmadas por los jugadores y en las que los dos conjuntos escribieron un mensaje.
Por otro lado, el club se mostró molesto con unas declaraciones realizadas por Paco González en Tiempo de Juego en la retransmisión del partido en las que mencionó que el conjunto rojillo se negó a realizar un minuto de silencio antes del inicio de partido ante un posible boicot desde Indar Gorri. Unas declaraciones que fueron inapropiadas y que carecen de fundamento puesto que la mencionada parte de la grada de Graderío Sur entró al partido en el minuto 12 del mismo, en protesta por la cantidad de multas que están recibiendo varios de sus miembros, un acontecimiento que también sucedió en el anterior encuentro liguero disputado en El Sadar ante el Celta de Vigo.
Homenaje a niños y niñas con cáncer
Con motivo del Día Internacional del Cáncer Infantil, jornada que tuvo lugar el pasado jueves, los jugadores se fotografiaron antes del comienzo del partido con un grupo de niños y niñas afectados por esta enfermedad. La afición rojilla animó a los txikis con un gran aplauso.
