A Munuera Montero se le achicharró su actuación en el partido entre Las Palmas y Osasuna por lo acaecido en las áreas. No fue en absoluto un encuentro difícil porque no hubo más embrollos de la cuenta, los jugadores se mostraroncorrectos y la actividad de los dos equipos circuló con relativa normalidad. Munuera Montero, sin embargo, tuvo que hacer una visita muy temprana al VAR para analizar el aparente atropello que cometió el portero de Osasuna, Sergio Herrera, sobre el velocísimo interior local, Marvin, que acabó con el jugador de Las Palmas por los suelos.

El árbitro principal no tuvo en consideración la caída, reclamada como penalti por los jugadores y la afición local, pero el árbitro del VAR, Valentín Pizarro Gómez, le llamó para que se cerciorara de la acción, se cerciorara o rectificara. La transcripción del audio del VAR entre los dos jueces se resume en que Munuera vio lo que tradicionalmente se suele llamar un piscinazo.

El diálogo completo es el siguiente: “ VAR: “Many, mira, te recomiendo un OFR -on field review, revisión en el campo de juego- para un potencial penalti. ¿De acuerdo? ¿Puedes venir a verla, por favor?”.

Árbitro: “Voy para allá”.

VAR: “Lo que hemos dicho. Le vamos a poner esa y luego le vamos a poner otra para que vea...”.

Árbitro: “Álvaro, que no entre nadie, por favor”.

VAR: “Manu, te vamos a poner el momento del impacto, como el portero, Sergio Herrera, no toca el balón en ningún momento, y luego te la vamos a poner en dinámica para que la veas. Cuando estés, me dices que te la abro”.

Árbitro: “Estoy aquí ya, la podéis poner ya en dinámica”.

Árbitro: “Para mi el contacto lo veo insuficiente, ¿vale? Quiero ver que otro sea más potente, quiero ver dónde le golpea. Si le golpea claramente en el pie o en la espinilla”.

Árbitro: “Ahí veo que el golpeo es con los guantes, para mí, muy ligero. Intenta golpear el balón, ¿vale? Y golpea más bien en el suelo. Páramelo, Pol, páramelo un segundo allí, por favor. Páramelo, páramelo. ¡Páramelo! Sigue, por favor, sigue. Los guantes siguen hacia abajo y para mí en ningún momento zancadillea. Dame otra cámara para comprobarlo”

VAR: “Te ponemos right rol -giro a la derecha-”.

Árbitro: “Nada, para mí se está cayendo él. Él va cayendo y el portero lo que hace es golpear el suelo. Para mí en ningún momento lo zancadillea. Pónme otra cámara más. Ponme inversa, ponme inversa”.

VAR: “Esta es reversa, esta es inversa. Manu, esta es inversa”.

Árbitro: “Dame otra, dame detrás de portería, por ejemplo. Esta por ejemplo es muy buena. El portero va a salir y golpea el suelo. Para mí nunca golpea al jugador, para mí no es penalti”.

Al volver al césped, Munuera decretó saque de banda.

Esa fue la acción en la que hubo VAR de por medio en cuanto a interlocución entre los dos árbitros, pero hubo otras acciones en las que los jueces decidieron que no era neceario, como una posible mano de Catena en el primer tiempo, el agarrón a Catena en el tiempo de descuento en el área de Las Palmas o la descarada entrada de Coco sobre Raúl García que acabó con el rojillo malparado. “Nos ha dicho el cuarto árbitro que era una reacción residual, que hay contacto después de que pase la acción”, dijo Arrasate después del partido.