Se desconocen sus nombres, pues Luis García Plaza no suele dar pistas en este sentido, pero el Deportivo Alavés tiene dos dudas de cara a su importante visita de esta noche (21.00 horas) a Osasuna. Ambas se deben a un proceso de gastroenteritis y, si este no va a peor, es probable que acaben estando disponibles, al contrario que el propio técnico babazorro, quien deberá seguir el derbi desde la grada tras su expulsión durante el reciente duelo contra el Mallorca (al técnico le mostró el árbitro Víctor García Verdura dos amarillas consecutivas en el minuto 88 del anterior partidos del cuadro vitoriano por sus reiteradas y airadas protestas).

“Se sufre mucho. No me gusta. Soy de los que admite sus errores cuando los comete, como hice con la primera amarilla, pero no hice nada para ver la segunda. Me duele y lo llevo muy mal; a veces, incluso, pienso en no ir”, manifestó el madrileño durante su comparecencia de ayer. La de El Sadar será la segunda vez esta temporada en la que Pedro Rostoll, su segundo, tendrá que tomar las riendas del conjunto gasteiztarra.

Sobre Osasuna, el rival del Alavés, Luis García destacó su talento físico, sin olvidar tampoco la atmósfera de sus gradas: “Es un equipo con un estadio que tiene un ambiente parecido al nuestro, y eso siempre suma. Además, llevan cinco años con Jagoba (Arrasate), a quien admiro mucho, y eso los hace ser un equipo muy estructurado. Te atraen para luego buscarte las espaldas y ganarte en los duelos y las segundas jugadas. Tendremos que estar bien ahí”.

Otra de las claves del encuentro, según admitió el entrenador babazorro, será el balón parado. Osasuna es, junto al Sevilla, el integrante de LaLiga que más goles ha marcado en este tipo de acciones. “Si junta a Catena y David García, que no sé si lo hará, tiene la pareja más potente en estrategia ofensiva de toda el campeonato. Son buenísimos en ese aspecto, por lo que tendremos que echarle narices y estar muy concentrados”, explicó.

Acerca de la mala racha del Alavés frente a los rojillos, vencedores en siete de los últimos ocho enfrentamientos directos, Luis García comentó que le gustaría “darle la vuelta a la tortilla”, si bien el empate tampoco sería malo. “Nuestro objetivo es cambiar de dígito, ya sea llegando a los 30 o los 32. Estamos siendo más competitivos fuera de casa y sería un paso importante”, agregó. Diez son los puntos que separan a los albiazules del descenso tras el punto sumado el sábado por el Cádiz en Vallecas.

Para finalizar, el técnico alavesista valoró que es “una pena” que un partido tan bonito como este se vaya a jugar en lunes: “El fútbol es de la gente que viene al campo y estos horarios perjudican, tanto a la afición de Vitoria, que luego tiene que coger carretera de nuevo para volver a casa, como a la de Pamplona. No hay mucho, eso sí, que los profesionales podamos hacer, más allá que darlo todo para dedicarles una victoria. Se pierde un ambiente precioso”.

El rival: el Alavés, Sólo una derrota en 2024

Contra el Barça en Mendizorroza (1-3). El recién ascendido Alavés es el rival propicio al que Osasuna recibe esta noche en El Sadar, pues los rojillos han salido triunfadores de siete de los últimos ocho enfrentamientos entre ambos equipos y en el otro empataron. Sin embargo, el equipo que entrena Luis García Plaza, que hoy no podrá sentarse en el banquillo por sanción, solo ha perdido uno de los ocho partidos de Liga que ha disputado en 2024 (1-3 contra el Barcelona en Mendizorroza) y no conoce la derrota en sus últimos cuatro desplazamientos: 1-1 en el Reale Arena, 2-3 con el Sevilla en el Sánchez Pizjuán, 0-3 en Almería y 1-1 con el Betis en el Villamarín.