Osasuna | Un mal día lo tiene cualquiera

Osasuna llegará a las vacaciones de Navidad con algunas cuestiones para repasar, buenas y no tanto, y de entre ellas le deberá echar un ojo a esos encuentros en los que la portería contraria se puso a kilómetros y kilómetros de distancia y se convirtió en un objetivo inalcanzable. Vicente Moreno mostró su contrariedad al finalizar el partido ante el Espanyol porque si el equipo llegó a Cornellá con la idea de ganar, algo se quedó por el camino cuando no alcanzó para los tres puntos. “Nos ha faltado circular más rápido para superar la presión del rival y finalizar más las ocasiones”, analizó el técnico rojillo como uno de los asuntos que no se logró descifrar para ganar.

Ante el Espanyol, Osasuna consumó su tercer encuentro de la temporada sin rematar entre los tres palos. Todos han sido lejos de El Sadar, pero los dos anteriores varían en cuanto a la talla del rival y, sobre todo, el desarrollo del partido. Al equipo rojillo le pasó por encima el Girona (4-0) –ha sido uno de los peores partidos de la temporada–, como tampoco le dio opción alguna el Real Madrid en el Santiago Bernabéu (4-0). En la última jornada, frente al conjunto catalán, no había tal diferencia futbolística –al contrario– y no hubo juego apabullante que soportar.

Los detalles de las estadísticas sirven para ayudar a enmarcar la reflexión del partido, aunque no lo resumen todo. Sin ir más lejos, en dos de los encuentros con más remates a puerta –con Leganés y Alavés– no se logró el triunfo. Contra el Barcelona se pilló la meta en cinco ocasiones y cuatro la pelota fue dentro.