Aunque las comparaciones resultan en ocasiones odiosas, en otras se convierten en un excelente baremo para comprobar en qué terreno nos movemos. Y basta con comprobar el número porterías a cero como visitante de Osasuna en las dos Ligas pasadas para darnos cuenta de la dificultad que entraña no encajar goles a domicilio en Primera División.

En la temporada 2023-2024, la última de Jagoba Arrasate en el banquillo del conjunto navarro, Osasuna dejó su portería a cero lejos de El Sadar en Liga en cuatro ocasiones, las mismas que en el curso 2024-2025, el primero y único de Vicente Moreno como preparador del cuadro rojillo.

La diferencia entre ambos casos es que Osasuna ganó los cuatro partidos en los que no encajó fuera con Arrasate (0-2 al Celta, 0-2 al Alavés, 0-1 a la Real y 0-3 al Almería), mientras que sólo uno con Moreno (0-2 a la Real), ya que los otros tres se saldaron con sendos empates (con Valencia, Espanyol y Leganés).

El Osasuna de Alessio Lisci lleva de momento esta temporada una portería a cero fuera en seis desplazamientos, lo que arroja un promedio a final de curso de 3,1, lejos, aunque no demasiado, de las cuatro de sus dos antecesores. Una comparación. Un reto.