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El turno de Herrando en Osasuna

El central de Campanas completa dos buenas actuaciones en ausencia de Boyomo, en la Copa de África, y afronta un enero ilusionante

El turno de Herrando en OsasunaAgencia LOF

Se fue Enzo Boyomo concentrado con la selección absoluta de Camerún para preparar y participar en la Copa de África de Naciones y Osasuna pierde a uno de sus mejores activos en el eje de la defensa. Sin embargo, Jorge Herrando Oroz (Campanas, 28/2/2001) ha aprovechado la ausencia de su compañero en los dos últimos compromisos oficiales del conjunto navarro para hacerse fuerte en el once de Alessio Lisci, reivindicarse en el terreno de juego y demostrar que, acuda o no el club al mercado de invierno para reforzar la defensa, está más que capacitado para convertirse en el relevo natural de Boyomo e incluso discutirle un puesto como titular a su regreso a Pamplona.

Herrando jugó de inicio el miércoles de la pasada semana en Huesca, donde Osasuna avanzó hasta los octavos de final de la Copa a costa de un rival de inferior categoría ante el que necesitó la prórroga (2-4). El central de Campanas actuó de salida en una defensa de cuatro, compartiendo el eje de la zaga con Asier Osambela, y fue sustituido por Alejandro Catena en el minuto 69, con 1-1 en el marcador, resultado con el que se llegó al final de los 90 minutos.

A Herrando le cambió Lisci en el torneo del KO por una cuestión de reparto de cargas físicas, pero el sábado también salió de titular en el partido de Liga contra el Alavés en El Sadar, donde Catena se convirtió en su compañero. Y ambos completaron una soberbia actuación, cuyo hito llegó en el minuto 65, todavía con empate sin goles en el electrónico, cuando entre ambos molestaron lo suficiente a Toni Martínez para facilitar que Sergio Herrera saliera triunfador de un mano a mano con el delantero del cuadro vitoriano. Lo que ocurrió después es que Ante Budimir marcó dos goles y Raúl García de Haro hizo otro más para rubricar una importante victoria en forma de goleada (3-0) y con portería a cero incluida por segunda vez consecutiva en El Sadar.

Boyomo, indiscutible

Sólo hay que acudir a la estadística para comprobar la relevancia de Boyomo en los planes de Lisci, que, hasta su marcha para disputar la Copa de África de Naciones con Camerún, había sido titular en los 16 primeros partidos de Liga de Osasuna, completando 13 de ellos y perdiéndose algunos minutos únicamente en las derrotas contra el Villarreal en La Cerámica (2-1), contra el Sevilla en el Ramón Sánchez Pizjuán (1-0) y contra la Real Sociedad en El Sadar (1-3). Y además de ser un fijo en la defensa del entrenador italiano, tanto en los partidos en los que los rojillos han jugado con tres centrales como en los que lo han hecho con dos, también aparece un gol en su hoja de servicios como rojillo, concretamente el que sirvió para firmar un agónico y postrero empate contra el Mallorca (2-2) en Palma, donde el conjunto navarro niveló un 2-0 adverso en los 10 minutos finales del encuentro.

En cualquier caso, las dos últimas actuaciones que ha completado Herrando han servido para que muy pocos, por no decir nadie, se hayan acordado de Boyomo, y hasta el propio entrenador de Osasuna destacó la actuación del canterano tras la victoria del pasado sábado contra el Alavés en El Sadar (3-0). “Creo que Jorge (Herrando) ha subido mucho el nivel”, afirmó delante de los periodistas un Lisci que reveló que su intención es la de jugar, a partir de ahora, con una defensa par, confiando también para esta misión de actuar como central en Asier Osambela y justificando los motivos por los que, hasta la fecha, su equipo ha jugado más veces con tres centrales que con dos: “Hay muchas razones. Ha habido un tramo que hemos perdido a Aimar y Aimar es importante porque con cuatro está mucho más cómodo y está cerca del extremo; de hecho, desde que ha vuelto Aimar el nivel de Víctor ha subido, y no es casualidad. Perdimos a Rosier, por lo que a Moncayola le teníamos que ayudar con un defensor más. Y Jorge (Herrando) tenía que subir su nivel y lo ha hecho. Muchas veces a los jugadores les puedes recuperar regalándoles minutos o apretando para que mejoren. Creo que hemos encontrado el mejor camino porque Jorge (Herrando) ha subido mucho su nivel y ahora estoy muy contento con él. Ha sido un mix de cosas y, además, fuera de casa los rivales eran muy difíciles. ¿Podíamos haber jugado con cuatro defensas en Barcelona? Puede ser, pero no estamos aún bien coordinados para ir allí a jugar con cuatro, pero creo que nuestro futuro es jugar con cuatro, con dos centrales todo es mucho más fácil”.

Con esta declaración de intenciones, a Herrando, al igual que a Osasuna, se le aparece en el horizonte un mes de enero tremendamente ilusionante, porque cuenta más que nunca para Lisci y, con Boyomo en la Copa de África de Naciones –no se sabe hasta cuándo–, tiene pinta de que va a volver a tener una oportunidad contra el Athletic (el sábado 3 de enero a partir de las 16.15 horas en El Sadar) y quién sabe si también en Girona (el sábado 10 de enero a partir de las 18.30 horas), luego en la Copa contra quien toque e incluso en la visita a Pamplona del Oviedo fijada para el sábado 17 de enero a las 18.30 horas. Todo dependerá del rendimiento del canterano y de las decisiones que adopte su entrenador, que, ya sea por valentía u obligación, va recuperando a futbolistas para la causa. Y Herrando es uno de ellos.

Sin amarillas

Además, al central de Campanas no le han amonestado todavía en lo que va de Liga y Catena acaba de cumplir sanción por cinco amarillas, por lo que ambos se encuentran lejos de estar apercibidos. Una ventaja.

El contrato

Fue en julio de 2023 cuando Osasuna anunció la renovación del contrato de Jorge Herrando con el club navarro hasta el 30 de junio de 2027 y con una cláusula de rescisión de 12 millones de euros. Aunque la entidad explicó en ese momento que se reservaba la posibilidad de aplicar, durante la vigencia del contrato, una subida automática de salario y cláusula ya pactada entre ambas partes, lo cierto es que son varios los meses que llevan hablando Osasuna y el jugador para ampliar la relación contractual entre las dos partes, con más años de duración, mejora salarial y subida de cláusula, una renovación en ciernes que, según ha podido saber este periódico, está bien encaminada.