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El segundo ascensor de Etxabakoitz estará listo para mayo

Dará servicio a 630 viviendas en las que viven muchas personas mayoresSalva 21 metros de desnivel con 2 elevadores

El segundo ascensor de Etxabakoitz estará listo para mayo

pamplona - Los vecinos de Etxabakoitz que residen en el entorno de la calle Concepción Benítez, donde se ubica el Centro de Salud del barrio o la Sociedad Deportiva Echavacoiz, tendrán desde su movilidad un poco más asequible a partir de mayo cuanto está previsto que entre en funcionamiento el ascensor urbano que se está construyendo en el lugar.

Para una zona con 630 viviendas en las que abundan las personas de edad avanzada, la medida supondrá un alivio considerable después de años de abandono y de demandas que no obtuvieron respuesta.

La obra permitirá salvar el desnivel de 21 metros existente entre la avenida de Aróstegui y la calle Teodoro Ochoa de Alda. Para ello se han levantado dos elevadores distintos situados entre los edificios y con trayectos concatenados para evitar los cuatro niveles de altura que hay.

El objetivo del proyecto era que estas alturas aterrazadas, que en origen se comunicaban exclusivamente a través de escaleras y rampas, ahora lo estén a través de dos elevadores con sus correspondientes pasarelas de embarque.

Los trabajos fueron visitados ayer por los integrantes de la Gerencia y de la Comisión de Urbanismo del Ayuntamiento de Pamplona, que pudieron apreciar los cortes en los muros para la colocación de tres de las pasarelas de los ascensores previstas en el proyecto.

La cuarta y última, de 20 metros de longitud y con desembarque en la calle Teodoro Ochoa de Alda, se colocará antes del inicio de la Semana Santa. Asimismo se han realizado ya las ‘cajas’ de los ascensores. Uno de los elevadores está prácticamente instalado y el segundo quedará terminado esta semana.

En ambos aparatos está pendientes la colocación de la parte frontal de la cabina (puertas de entrada y salida), que tendrá acabado en vidrio transparente. Las cabinas son de 1,4 x 1,6 m. y de 2,1 m. de alto y poseen una capacidad máxima de 13 personas. Los dos ascensores tienen el mismo diseño e imagen y sus muros laterales son de hormigón con acabado grecados, de forma que respeten la imagen de los muros del entorno.

Para su funcionamiento, el primer ascensor salva una altura aproximada de ocho metros y tiene un desembarco de 180 grados, es decir, los usuarios descienden por el lado contrario al que acceden.

Desde este lugar se puede continuar hacia el embarque del segundo ascensor -que tiene también una puerta de entrada y otra de salida- y realiza dos paradas intermedias, alguna de ellas con menos de dos metros de diferencia respecto a la anterior, para que se puede acceder a todos los portales. El último trayecto, hasta la altura de la calle Teodoro Ochoa de Alda, se vale de una pasarela para conectar el elevador, mediante una rampa, con la cota de la calle.

Durante la intervención han comenzado también los trabajos de urbanización con la ejecución de nuevos recorridos y la mejora de otros ya existentes. Asimismo el proyecto de AH Alonso, Hernández y Asociados prevé la creación de pequeñas plazas de estancia con bancos y la ordenación de los espacios de juego infantil que hay en la parte más baja de las obras. Asimismo se ha reorganizado el arbolado y se ha hecho un estudio de la iluminación de la zona.

Para la construcción del ascensor, el Ayuntamiento y la empresa constructora respetaron, a instancias de los colectivos vecinales del barrio, un monolito que recordaba a un joven del barrio (César Nieto Jiménez) fallecido en un accidente montañero en Nepal en 2001. Sus amigos y familiares colocaron el monolito en el espacio que iba a ser utilizado para el ascensor. La piedra sigue ahí, al lado del lugar que ocupaba.

Medio millón de coste. El presupuesto de los dos elevadores y la urbanización es de 562.792 La obra, a cargo de Arian comenzó en octubre del año pasado.

Ya hay nueve elevadores. Pamplona cuenta ya con nueve ascensores urbanos en funcionamiento. El primero fue el de Erletokieta, en 2004, después se construyeron los elevadores en la Milagrosa (2006), Descalzos (2008), San Juan (2008), Media Luna (2010), Julián Gayarre (2011), calle Monjardín (2012) y en 2013 se puso en funcionamiento el octavo en Etxabakoitz norte.