Pamplona. La Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Pamplona ha aprobado destinar 50.000 euros para encargar más de 300.000 vasos reutilizables este año y extender su uso en todos los actos festivos de la ciudad más allá de los sanfermines.

El objetivo central es conseguir minimizar los residuos producidos en las fiestas y eventos de la ciudad, ha informado el consistorio, que señala que se apuesta por distribuir en todos los espacios festivos y establecimientos hosteleros el mismo modelo de vaso e implicar a la ciudadanía en el cuidado de la propia ciudad, especialmente en sanfermines y en otras fiestas.

El contrato para prestar este servicio de reparto y recogida se reserva a la participación de centros especiales de empleo sin ánimo de lucro, como son los centros de inserción sociolaboral.

El contrato tiene un presupuesto de 50.000 euros y abarca el sistema integral del vaso: recepción de peticiones, entrega y reparto de los vasos reutilizables municipales en los locales solicitantes, recogida de los vasos sucios, limpieza, almacenaje, recompra de vasos reutilizables, gestión de facturas, labor comercial y de sensibilización.

El sistema que promueve el Ayuntamiento de Pamplona permitirá poner a disposición de los bares, peñas, asociaciones de barrios y otras entidades de la ciudad más de 300.000 vasos, con lo que el objetivo es lograr que en toda la ciudad y en los eventos festivos que en ella se celebren se utilice un único vaso reutilizable.

Los técnicos municipales del Área de Ecología Urbana y Movilidad están manteniendo reuniones con las asociaciones de hosteleros, comisiones de barrios y peñas para informarles de las novedades de este año.

Como en otras ediciones, habrá tres tamaños de vasos: de 30, de 50 y de 100 centilitros, pero como novedad se promueve una nueva forma de gestión que haga copartícipe también al establecimiento.

En 2017 el servicio se prestó de manera gratuita, de forma que tanto el propio vaso, como la distribución y su limpieza, se facilitó a los establecimientos sin coste por su parte.

Entonces los bares cobraban un euro a la clientela, que contaban con la posibilidad de devolverlo una vez utilizado o de intercambiarlo por uno limpio en cualquier momento. Al finalizar las fiestas, los establecimientos devolvían los vasos y entregaban el dinero correspondiente al valor de los vasos no devueltos.

Con el nuevo sistema propuesto para este año se busca equilibrar la relación económica y hacer tanto a locales de hostelería como a colectivos partícipes del beneficio que deja el vaso no devuelto. La propuesta es que los bares y espacios sociales asuman un pago inicial de 32 céntimos por el vaso tamaño caña, que pasarían a ser propiedad del establecimiento y los podría volver a utilizar en los años siguientes. Los envases de medio litro tendrían un coste de 42 céntimos y los de litro de 47 céntimos.

El Consistorio correría con parte de los gastos de la limpieza, gestión y almacenamiento del vaso, mientras que el bar se quedaría con el euro aportado por el cliente que no devuelva el vaso.

Las mismas fuentes recuerdan que en 2016 y 2017, el Ayuntamiento ya impulsó el uso del vaso reutilizable durante los sanfermines, y en la campaña 2017 participaron hasta 50 espacios festivos entre los que se incluían bares, peñas, barras de adjudicación municipal, Plaza de Toros y el Frontón de Labrit.

En total, el Ayuntamiento distribuyó 284.520 vasos, a los que hay que sumar los que pusieron en circulación otras iniciativas ciudadanas, como Gora Iruñea, Nafarroa Oinez y la hostelería del centro.

Según datos del consistorio, se lavaron y recuperaron 119.000 de ellos, lo que significa que en torno al 47 % de los vasos volvieron al sistema y se reutilizaron una media de 5 veces. Según los cálculos del Consistorio eso conllevó un ahorro estimado en emisiones de CO2 de 4,9 toneladas, que es la cantidad que se hubiera generado para fabricar un número equivalente de vasos desechables.

Con respecto a la recogida de basura, la reducción de los residuos de calle o de barrido en los últimos Sanfermines descendieron un 21,82 % con respecto al año pasado (de 422 toneladas a 330 toneladas) algo en lo que el vaso reutilizable se valora como un elemento clave, al incidir sobre la población más joven y el horario nocturno.

La ciudad que ha servido de referencia para implementar en Pamplona el sistema de vaso reutilizable ha sido Bayona, donde se puso en marcha en el año 2011 con un reparto de 1,2 millones de unidades en 400 bares.

El funcionamiento es similar al implantado en Pamplona, ya que la persona usuaria paga un euro por el vaso reutilizable, dinero que se le devuelve si retorna el vaso. Cada día los vasos se lavan y están listos para la siguiente jornada.

Aproximadamente el 30 % de los vasos no se devuelve. Los vasos no devueltos no acaban en el suelo -y por tanto en vertedero- debido al valor de la fianza, sino que es habitual que las personas que los han usado se los lleva para diferentes fines.