Se les conoce como los gigantes txikis del Casco Viejo, pero son muy grandes. Este sábado celebraron sus 25 años, pero para el barrio parece que han estado toda la vida, a tenor del cariño que se les tiene. Y es que Joan y Mari (los agricultores); Bernard y Aines (los mercaderes) y Martin y Katalin (los zapateros), las figuras que integran la Comparsa de Gigantes Txikis desde 1997, fueron creados con la idea de representar a los vecinos y vecinas y aquellos gremios que habitaban los burgos de Iruña por el siglo XV, antes del privilegio de la Unión, que dictó Carlos IIIen 1423 y que uniría las tres poblaciones en lo que hoy es la Pamplona actual.

Este sábado, han festejado su aniversario, y a pesar de las trabas del Ayuntamiento de Pamplona que había prohibido el desfile (no lo autorizó hasta el jueves) y de la lluvia, han podido salir a la calle para el regocijo de txikis y grandes. A las 10.30, dada la incesante lluvia, la Comparsa ha protagonizado unos bailes en el interior de Plazara! pero después ha parado el aguacero y han desfilado en kalejira hasta la calle San Agustín.

La comparsa txiki del Casco Viejo, con las figuras de Martin y Katalin en primer plano, bailando en Plazara! IÑAKI PORTO

Allí, en lo que hoy es el aquavox y antes fue el frontón Euskal Jai, Toni Iragi, uno de los impulsores de la comparsa hace 25 años, ha recordado cómo las figuras “las fabricamos en el Euskal, en el gaztetxe, por eso hemos querido venir hasta aquí a recordarlo. Unos hacían los moldes, otro grupo los trajes...”. Los 6 gigantes txikis (miden unos 2,50 metros de altura y pesan cada uno unos 15 kilos) fueron construidos en auzolan por los vecinos y vecinas, asesorados, según ha detallado, por la Comparsa de San Jorge. “Recuerdo que los fines de semana nos bajábamos hasta Sanduzelai a aprender los bailes". También ha querido destacar cómo las figuras han sido protagonistas de dos momentos distintos del Casco Viejo. “Entonces Barcina derribó el Euskal Jai y puso en marcha un modelo de barrio al servicio de los intereses inmobiliarios y de la hostelería” y “frente a la cultura popular”, mientras que hoy “es el vecindario el que apuesta por poner los intereses del barrio por encima de los intereses de negocio”. 

Sentimiento de barrio

La Comparsa de Gigantes Txikis del Casco Viejo fue creada para los chavales del barrio, con el objetivo de impulsar “ese significado de pertenencia al barrio, de querer al barrio, haciéndoles a ellos protagonistas llevando a los gigantes”, ha explicado Iragi. 

Y parece que lo han conseguido. Ekiñe Sagastibeltza, monitora de Aldezar, destaca que, 25 años después, el colectivo sigue más vivo que nunca, y hay una veintena de gaztes en la Comparsa. “Para nosotras la base de la cultura de Iruña es un motor que nos une”, y “desde hace 25 años, es un orgullo que se siga manteniendo”, opina. Porque se trata de una actividad cultural, y “más allá del ocio, tratamos de educarlos en valores comunitarios, porque, a parte, se están formando”, explica. “Por eso, la comparsa es una de las actividades estrella” de Aldezar. 

Hasta 22 chavales integran la Comparsa de Gigantes Txikis del Casco Viejo y cuentan con el apoyo de los monitores Ieltxu Salguero, Ekaitz Preciado y Beñat Preciado, educadores de Aldezar. “Sus citas clave son el Día del Casco Viejo y San Fermín Txikito, pero siempre están dispuestos a acudir a dónde se les invite y demostrar el trabajo que han hecho durante el año”, añade Sagastibeltza. Este sábado Aldezar se lo ha agradecido y les ha entregado a cada txiki de la comparsa una camiseta conmemorativa del aniversario. ¡A por otros 25 años más!

Chavales del barrio, 22 en total, están al cuidado de los seis gigantes. IÑAKI PORTO