Los vecinos de Etxabakoitz, Buztintxuri, Rochapea y la Txantrea son los más “insatisfechos” con sus casas, según el diagnóstico sobre las necesidades de vivienda publicado por el Ayuntamiento de Pamplona.
En Etxabakoitz, un 30% de los residentes encuestados opinan que viven en una vivienda “regular”. En Buztintxuri, un 18% de los vecinos califican su vivienda como “regular” y otro 2% como “mala”. En la Rochapea se repite una situación similar: un 15% de los vecinos sostienen que residen en una casa “regular” y otro 3% en una “mala”.
Los txantreanos son los menos satisfechos con sus viviendas –solo un 27% la considera “muy buena”– y en el Casco Viejo un 5% de los vecinos tachan su hogar de “malo”, el porcentaje más alto de todos los barrios de la ciudad.
Los principales problemas que detectan estos vecinos son los ruidos, las humedades, la falta de garaje, la ausencia de ascensor o que la casa es “muy vieja”. El Casco Viejo es el barrio con más quejas: un 76% de los vecinos critican que sus vivendas presentan algún tipo de inconveniente. A los problemas citados anteriormente, hay que sumar la “inadecuada” calefacción y la falta de espacio para criar a la familia.
Por otro lado, el 61,1% de los pamploneses encuestados aseguran que su vivienda no presenta ningún problema. Este porcentaje asciende al 66,6% en Iturrama, al 68,6% en Ermitagaña y al 82,2% en Lezkairu, los más satisfechos con su residencia. En concreto, un 72% la califica como “muy buena”, un 26% “buena” y “regular” solo un 2%.
En la misma línea, los vecinos de Lezkairu son los que menos inconvenientes sacan a sus viviendas y solo un 17,8% reporta algún tipo de problema. El 7,7% critica las humedades y las dificultades para ventilar, el 5,9% se queja de ruidos y un 4% opina que su casa es “pequeña”.
Delincuencia e inseguridad
El diagnóstico sobre las necesidades de vivienda también recoge los principales problemas que los pamploneses detectan en su barrio. Los inconvenientes más importantes son las dificultades para aparcar –20,3% de los encuestados–, el exceso de tráfico –15,2%–, la delincuencia e inseguridad –11,8%–, la escasez de servicios –9,3%–, la suciedad –8,1%–, o la falta de guarderías y polideportivos –7,9%– . Eso sí, según el estudio del Ayuntamiento de Pamplona, un 44,7% de los ciudadanos no detecta ningún problema en su entorno.
Por barrios, el Casco Viejo vuelve a presentar la tasa más alta y un 88% de los vecinos afirma sufrir algún problema. Los tres principales, con porcentajes muy parejos, son las dificultades para encontrar una plaza de aparcamiento, el exceso de tráfico y la ausencia de instalaciones deportivas y de parques infantiles.
En el resto de la ciudad, las principales quejas son los ruidos y el exceso de tráfico rodado –Azpilagaña, Ermitagaña, Iturrama y San Juan–, la delincuencia e inseguridad –Buztintxuri, Milagrosa y San Jorge–, la escasez de servicios –Mendillorri y Lezkairu–, las dificultades para aparcar –Txantrea, Ensanches y Rochapea–, y en el caso de Etxabakocritican la “poca limpieza” y la “mala” recogida de basuras.
