El informe de la Cámara de Comptos sobre el futuro de Erripagaña ha tenido la inmediata respuesta de los cuatro ayuntamientos de la Comarca de Pamplona a los que pertenece, cuya afección será diferente en función de la solución que se adopte finalmente.

Veinticuatro horas después de hacerse público el contenido del informe del órgano fiscalizador, cuya conclusión es que “lo más razonable” sería que Erripagaña quedara en manos de Pamplona, Burlada o de ambos municipios, ha llegado la hora de las valoraciones.

El alcalde de Pamplona Joseba Asiron (EH Bildu) ha mostrado la disposición de Pamplona a asumir Erripagaña como “un barrio más” y ha dicho que ya “ha llegado por fin el tiempo de terminar con las palabras vacuas y de ponernos manos a la obra”.

Ha señalado que “el horizonte es que a fines de 2025, en una reunión entre los cuatro ayuntamientos y el Gobierno de Navarra, ya tengamos una decisión definitiva”. En todo caso, ha afirmado que “tiene que ser el vecindario, a través de un proceso participativo bien informado, el que tiene que tomar esa decisión”.

Joxe Abaurrea, concejal delegado de Gobierno Estratégico en el Ayuntamiento de Pamplona, ha recordado que “seguimos con la hoja de ruta marcada en la reunión de los cuatro ayuntamientos con el compromiso de tratar de consensuar una solución de futuro para el barrio de Erripagaña, que la situamos en los meses de abril o mayo de 2025”.

“Ha llegado el tiempo de terminar con las palabras y de ponernos manos a la obra”

Joseba Asiron - Alcalde de Pamplona

El portavoz de la izquierda abertzale ha añadido que “la mejor propuesta será aquella que sea capaz de concitar el respaldo de los ayuntamientos, del Gobierno de Navarra y del propio vecindario” y ha reiterado que “Iruña está dispuesta, creemos que es una opinión mayoritaria en la Corporación, a asumir a Erripagaña como nuevo barrio de la ciudad siempre que sea fruto de un acuerdo bueno y respetuoso con los demás ayuntamientos”.

Por último, Abaurrea ha mencionado que “tenemos un grado de comprensión muy alto sobre la situación y dificultad para tomar una decisión del Ayuntamiento de Burlada porque es el que mayor impacto deberá soportar en cualquiera de los escenarios planteados”.

Burlada, la situación más comprometida

La alcaldesa de Burlada, Berta Arizkun (EH Bildu), asume que “la situación más comprometida es la de Burlada” y sobre el informe de la Cámara de Comptos ha manifestado “que es una herramienta más a tener en cuenta en el camino hacia la búsqueda de soluciones y coincidimos con él en varias cuestiones, como en la necesidad de poner cordura y racionalidad a la división administrativa o realizar una proyección tanto de los gastos en inversiones como de gasto corriente a futuro”.

“La solución tendrá que ir acompañada de una apuesta política singular”

Berta Arizkun - Alcaldesa de Burlada

La regidora de Burlada defiende que el proceso de resolución “debe contar con el trabajo en común interadministrativo de los distintos municipios y del Gobierno de Navarra, ya que las decisiones y soluciones tendrán que ir acompañadas de una apuesta política y administrativa singular, dada la complicada génesis del barrio”.

Arizkun mantiene que “la decisión será tomada de la mano del vecindario” y ha reiterado “el compromiso adquirido en su día de seguir trabajando para resolver este complicado asunto en esta legislatura”.

Alfredo Arruiz (EH Bildu), alcalde de Huarte, destacó que el mayor problema ha sido “la no ejecución de las dotaciones básicas para el barrio, como salud y educación” pero quiso señalar que pese al retraso “estas dotaciones están en marcha y se van a ejecutar”.

“Huarte no va a ser un obstáculo para la resolución del futuro de Erripagaña”

Alfredo Arruiz - Alcalde de Huarte

El representante de Huarte señaló que “cada pueblo que dé sus claves y mensajes en base a sus intereses sociales y políticos” e insistió en que Huarte “no va a ser un obstáculo para la resolución final del futuro de Erripagaña”.

El alcalde no oculta que la situación “más comprometida puede estar en Burlada por la situación económica, de raíz estructural, que tiene el municipio” y sobre el informe de Comptos señaló que “tenemos que seguir valorando y profundizando en el estudio de las implicaciones para la toma de las decisiones de manera lo más meditada y analizada posible”.

Criticas desde Sarriguren

La más crítica con el informe de Comptos ha sido la alcaldesa del Valle de Egüés, la regionalista Xuriñe Peñas, quien ha asegurado que le “parece sesgado” porque “no tiene toda la información necesaria para hacer un completo análisis”, como que no se han estimado los gastos corrientes que supone atender a la ciudadanía en Pamplona o Huarte ni las inversiones realizadas hasta ahora.

“Me parece un informe sesgado porque no tiene toda la información necesaria para hacer un completo análisis”

Xuriñe Peñas - Alcaldesa del Valle de Egüés

“Una de las opciones que plantea el informe es que Erripagaña pasara a formar parte de Pamplona y Burlada, alternativa que merma el problema que plantea la ciudadanía pero en ningún caso la eliminara. Necesitan una solución real, mismo derechos y obligaciones, acceso a los mismos servicios públicos y la financiación de los mismos de una manera universal para todo el barrio”, ha comentado la alcaldesa del Valle de Egüés.

Por último, Xuriñe Peñas ha aludido al papel del Gobierno de Navarra, a quien reclamó que se “involucre en la solución definitiva para Erripagaña, como se hizo en su día con Mendillorri que perteneció al Valle de Egüés”.

PSIS de 2004

Erripagaña, con una extensión de 800.000 metros cuadrados y unos 9.000 vecinos, surgió a través de un Plan de Incidencia Supramunicipal aprobado en 2004. El 59% de su territorio pertenece a Burlada, Pamplona tiene el 21%, mientras que Valle de Egüés y Huarte tienen el 10%.

En el informe de la Cámara Comptos se recogen tres opciones. Si Pamplona asume la gestión total de Erripagaña, le supondría un incremento neto anual de ingresos de 3,6 millones de euros. En cambio, Burlada perdería 2,6 millones, mientras que el Valle de Egüés dejaría de percibir un saldo neto de 0,78 millones y Huarte, 0,3 millones (sin gastos).

Si es Burlada la que asume en su totalidad a Erripagaña, sus ingresos anuales se incrementarían en 3,67 millones anuales y sus gastos corrientes, en 0,16, quedando un saldo neto de 3,51 millones. Pamplona perdería unos, 1,96 millones anuales, Egüés, 0,80 y Huarte, 0,31.

La tercera opción, que Pamplona asume su parte y Burlada, la de Egüés y Huarte, supondría a Burlada un incremento neto de 1,34 millones. Pamplona pierde 60.421, Egüés, 0,79 millones y Huarte 0,30 millones.