barcelona. El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, marcó ayer distancias con la denominada "tercera vía", entre los que quieren la independencia de Cataluña y los que rechazan el sistema actual, mientras que dirigentes del CDC y de UDC discreparon públicamente sobre cómo afrontar el reto soberanista. "No sé exactamente en qué consiste la tercera vía", aseguró Rajoy al ser preguntado por las tesis que apuestan por esa opción, como las defendidas por el líder del PSC, Pere Navarro, y el de Unió, Josep Antoni Duran Lleida, en la rueda de prensa que ha ofrecido en Tokio junto con el primer ministro japonés, Shinzo Abe.

"matices" Después de la reunión de anteayer entre Duran Lleida y Navarro para explorar una tercera vía, el secretario de organización del CDC, Josep Rull, admitió que los "matices" de Duran no ayudan a explicar el compromiso de CiU con el proceso soberanista. En declaraciones a la emisora La Xarxa, Rull reconoció que cuando el líder de Unió dice que la tercera vía aún no ha muerto hay "una arista" y una "diferencia de percepciones" con respecto a CDC. "CiU tiene una hoja de ruta, que incluye el ejercicio del derecho a decidir y la formación de un Estado soberano en Europa", recordó, y añadió que "todos los intentos de conseguir un encaje en el Estado han fracasado estridentemente".

Por su parte, el vicesecretario general del CDC Lluís Corominas pidió a los dirigentes que apuestan por una "tercera vía", como Duran, que apoyen la creación de un Estado propio cuando se den cuenta que el Gobierno no ofrecerá ninguna alternativa viable. Pese a ello, el vicesecretario general de UDC, Antoni Font recordó a CDC que el programa electoral de CiU no habla ni de independencia ni de plebiscitos. "Consulta y Estado propio... No podemos estar más de acuerdo... Si querían decir plebiscito e independencia sólo hacía falta plantearlo y hablarlo", aseguró en su cuenta de Twitter.