pamplona - El Ministerio del Interior pagó un millón y medio de euros a un informante que proporcionó acusaciones falsas sobre el exalcalde de Barcelona Xavier Trias, a quien le atribuyó cuentas irregulares en Suiza. Su objetivo ERA neutralizar a Trias como rival político a través de la guerra sucia contra políticos catalanes, según informó el diario Ahora.

El encargado de realizar el pago fue José Ángel Fuentes Gago, la mano derecha del número dos de la Policía Eugenio Pino, el encargado de dirigir a los agentes al margen de cargos públicos. Fuentes Gago, que actuaba como una especie de jefe de gabinete de Pino, tenía como objetivo entregar el maletín en Suiza. Allí voló, a mediados de septiembre de 2014, en un avión de la Policía.

La información que obtuvo Fuentes Gago a cambio del pago millonario resultó ser falsa. Un falso escándalo que no contaba con ninguna prueba que lo sustentara, pero que no evitó que fuera difundido por los periodistas Eduardo Inda, Esteban Urreiztieta y Fernando Lázaro desde las páginas de El Mundo.

Precisamente por esta “política sistemática de revelaciones y desviación de poder” es por el que Trias y el Partit Demòcrata Catalán (PDC) tienen en marcha una querella contra el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz y contra el exdirector de la Oficina Antifraude Daniel de Alfonso a raíz de la fabricación de escándalos contra políticos catalanes soberanistas que fue desvelada por Público.

La querella se tramita por procedimiento abreviado, después de que la Fiscalía Anticorrupción desmontara la patraña y archivara la denuncia inicial de la Policía al estimar que carecía de indicios que avalaran la existencia de las cuentas en el extranjero atribuidas al querellante.

El caso viene a sumarse a la serie de acciones emprendidas por la que se ha dado en llamar Policía política formada por comandos patrióticos, a la manera del destacado en este caso en Suiza, que han sido utilizados para destruir a los adversarios del ministro.

De hecho, ayer mismo la defensa del excomisario José Manuel Villarejo ha cuestionado que el juez Arturo Zamarriego reclame a la Dirección General de la Policía que aporte la relación de viajes a Cataluña que realizaron entre 2012 y 2014 los comisarios de este Cuerpo José Manuel Villarejo y Marcelino Martín-Blas.

Villarejo ha presentado un escrito en el que duda de la “utilidad y pertinencia” de lo dispuesto por Zamarriego en una providencia del 11 de julio, días después de que este policía que se definía hasta su reciente jubilación como “agente encubierto” mencionara en sede judicial -donde declaró en calidad de investigado- los viajes que realizaron en relación con el desafío independentista.

Entiende este veterano policía que la relación de viajes a Cataluña no guarda relación con el objeto de la investigación del caso Nicolay, una derivada del Pequeño Nicolás que ha contado con el propio Martín Blas, exjefe de la Unidad de Asuntos Internos y uno de los policías implicados en la conversación, al frente de la comisión judicial por asignación directa del magistrado.

Para esta comisión, Villarejo es el responsable de la grabación en la que se hablaba de las diligencias policiales practicadas contra Francisco Nicolás Gómez Iglesias, lo que ha motivado la queja de este expolicía al entender que Martín Blas -con el que mantiene una disputa encuadrada en la llamada ‘guerra de comisarios- no puede investigar una causa en la que también es uno de los perjudicados. Esto mismo ha sostenido el fiscal asignado al caso, Alfonso San Román.

guerra sucia El exalcalde de Barcelona y actual jefe de la oposición en el Ayuntamiento de la capital catalana denunció que “la guerra sucia” de Interior “le ha perjudicado” electoralmente y afirmó que “el ministro Fernández Díaz es un hooligan y debería cesar”. Trias tildó de “vergüenza” la posibilidad de que el Ministerio del Interior haya podido pagar a un confidente para que le pasara información de una supuesta cuenta bancaria en Suiza atribuida falsamente al exalcalde.

El líder de CiU en el Ayuntamiento de Barcelona, aseguró, además, que los partidos no piden explicaciones al ministro del Interior por las conversaciones con el exdirector de la Oficina Antifrau de Catalunya (Oac) Daniel de Alfonso porque “tienen miedo a la información que pueda tener”.

El exalcalde criticó que Fernández Díaz no haya dimitido y que el exministro de Industria José Manuel Soria haya renunciado al cargo al que optaba en el Banco Mundial: “A algunos les parece más importante el tema de Soria que el de Fernández Díaz, cosa que me sorprende”.

“Es muy extraño que sean capaces de pedir comisiones para que Soria o De Guindos se expliquen y ni socialistas ni C’s ni Podemos pidan la comparecencia de Fernández Díaz”, apuntó, y reiteró que, para él, el caso de Fernández es mucho más grave que la proposición de Soria.

CDC y Xavier Trias presentaron a principios de septiembre una querella contra el ministro y el exdirector de la Oac por supuestos delitos de prevaricación, violación de secretos y malversación de fondos públicos.

Trias reveló que ha ampliado su querella contra Fernández Díaz, y tachó al ministro de “profundamente deshonesto y que ha cometido irregularidades”, e insistió en que una persona así no puede continuar siendo ministro, según él.

Además, admitió que se ha sentido “muy poco acompañado” por el resto de grupos políticos en relación a la querella, a excepción de ERC, y manifestó que la Agencia Tributaria no le ha pedido ninguna información.

Preguntado por si considera que el ministro tiene una fijación con él, Trias rechazó que sea así, pero matizó que “está obsesionado con la unidad de España”, y que, para defenderla, está dispuesto a utilizar los mecanismos del Estado.

Trias lamentó la utilización en campaña electoral por parte de BComú de las informaciones publicadas en las que aseguraban que el exalcalde tenía cuentas en Suiza, y también criticó que el teniente de alcalde de Barcelona, Gerardo Pisarello, se haya referido a “la mafia de Convergència y Trias”. - D.N.