pamplona - La acusación que ejercen la viuda y el hijo del juez José María Lidón, María Luisa Galárraga e Iñigo Lidón, pidió ayer que se imponga la pena máxima al ex jefe de ETA Garikoitz Aspiazu Rubina, alias Txeroki, y al miembro de la banda Asier Arzalluz Goñi por el asesinato del magistrado en 2001.

En su alegato final ante la Sección Tercera de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional, el abogado de los familiares elevó así a definitivas sus conclusiones respecto a los dos miembros de ETA para quienes solicita 30 años de cárcel por el asesinato a tiros del juez Lidón el 7 de noviembre de 2001 cuando salía en coche de casa junto a su mujer en Getxo, un atentado del que también fue testigo su hijo desde su propio vehículo.

La Fiscalía, sin embargo, modificó su planteamiento inicial y retiró la acusación sobre Arzalluz porque considera que no ha quedado acreditado que en aquellas fechas formase parte del comando Olaia al que, según la jurisprudencia, sí pertenecía ya Aspiazu. Los familiares, le identificaron en 2011 cuando vieron imágenes suyas por televisión y que hasta entonces, no habían podido señalar al asesino del juez.

Por su parte, la defensa de Txeroki y Arzalluz denunció las “conjeturas” y “elucubraciones” en el proceso, ya que no se puede mantener una acusación semejante cuando todo lo que se tiene es una identificación a raíz de ver unas imágenes en televisión muchos años después de que se cometiera el atentado. - D.N.