El parlamentario de EH Bildu Adolfo Araiz manifestó este lunes que el caso Pegasus es “un caso flagrante de espionaje político” y añadió que “no es ninguna novedad y no debe quedar impune”. Además, alertó de que se trata de un asunto que “no ha favorecido nada para las relaciones con el Gobierno del Estado” que preside Pedro Sánchez.

En declaraciones a los medios de comunicación, Araiz consideró que “mantener relaciones ordinarias y en algunos casos de socio presupuestario con alguien que te espía es complicado”. “El Gobierno debiera ser el primero en entenderlo y estamos trabajando con otras formaciones políticas”, recalcó el portavoz de EH Bildu antes de indicar que la actitud del ministro Félix Bolaños el domingo en Barcelona es “insuficiente” y es un “lavado de cara”.

El parlamentario ha pedido una investigación interna, “con supervisión independiente”, para aclarar “quién, por qué y por orden de quién se ha espiado, así como qué se ha hecho con esa información y si sigue guardada”.

Igualmente, ha solicitado que se cree una comisión de investigación en el Congreso y que se asuman responsabilidades. “Pedimos al Gobierno español explicaciones, transparencia y que se asuman responsabilidades”, expuso, para señalar que “mientras todo esto no se produzca las relaciones no serán lo fluidas que eran hasta ahora y pueden suponer un punto y aparte”.

No obstante, reconoció que son “escépticos sobre el resultado final porque en otras ocasiones hemos visto la voluntad de investigación por parte del Estado español”. “El Estado español está tratando de escurrir el bulto”, denunció.

“Es un asunto que

no ha favorecido nada para las relaciones con

el Gobierno del Estado”

Coportavoz de EH Bildu